Treinta representantes del sector público y privado de la comuna de Tirúa participaron en el primer taller de trabajo para identificar diversas necesidades y alternativas de continuidad de estudio, técnico profesional o de educación superior, con un fuerte énfasis en interculturalidad para esa comuna y otras colindantes. La iniciativa cuenta con el apoyo técnico de la Universidad del Bío-Bío, por medio de la participación de la Dirección General de Investigación, Desarrollo e Innovación, la Dirección de Formación Continua, el Centro de Estudios Urbano Regionales (Ceur) y la colaboración de la Dirección General de Comunicación Estratégica (DGCE).
El taller fue facilitado por profesionales del Ceur con colaboración de la DGCE, el que se desarrolló con la aplicación de metodologías participativas de pertinencia cultural con el fin de auscultar necesidades vinculadas a la cultura Mapuche-Lafkenche, su historia y visión de mundo.
La bienvenida a la actividad estuvo a cargo del alcalde de Tirúa, Adolfo Millabur, quien informó a los participantes sobre las gestiones que está realizando el municipio para llevar adelante esta iniciativa y el rol que cumple la comunidad para la elaboración de la propuesta. “Ustedes serán parte de algo muy importante, están invitados para dar una opinión constructiva”.
Agregó que la Interculturalidad es clave en Tirúa, “comuna donde conviven dos culturas que deben conocerse, dialogar, desarrollarse y establecer fuertes vínculos. La educación intercultural, dijo, es una demanda nacional, pues no existe en Chile, por lo tanto, la empleabilidad de los profesionales interculturales sería alta.
Por su parte, la antropóloga del Ceur y coordinadora del taller, Magaly Mella, señaló que la actividad respondió al compromiso de apoyo técnico que asumió la UBB, a través del rector Héctor Gaete. “Nuestra Universidad viene desarrollando hace años iniciativas que contribuyen al saber de la interculturalidad en la Región y el país, no sólo en la cultura Mapuche, sino en todo el territorio. La interculturalidad es un desafío para las instituciones públicas y especialmente, para las universidades, así lo entiende nuestra Institución, única universidad estatal y pública de la Región, que con estas acciones ratifica su interés por avanzar en esa dirección”, expresó.
Para Pablo Antil, dirigente de la Reducción Danquil, contar con educación superior sería un logro para la comuna. “Nos faltan profesionales, no tenemos las capacidades y necesitamos educación, es nuestra gran necesidad. Debemos recuperar nuestra cultura, porque actualmente en el liceo no le dicen a mis hijos quienes son, de dónde provienen. En ninguna parte se les habla de su cultura”, enfatizó.
Por su parte, Sandra Barra funcionaria del Centro de Salud Familiar de Tirúa, mencionó como fundamental contar con una institución de educación superior que sea la cuna de la formación intercultural. “Hoy la interculturalidad es una pincelada. Se habla de ella, pero la gente no sabe en qué consiste, por eso es importante que esté presente en la malla curricular de los estudios superiores”.
El presidente de la reducción de Ponotro, Bernardo Lepuman, compartió esa idea y agregó que “falta educación en el territorio. Los habitantes no conocen la historia, nuestros niños ni siquiera saben su idioma. Faltan profesionales que enseñen la lengua”, afirmó.
La continuidad de estudios para los jóvenes del sector, pero también para los adultos y especialmente para las mujeres, fue un aspecto a considerar por Miriam Espinoza, de Relmu Witral, quien aseguró que el país tiene una deuda histórica con las mujeres. “Nosotras podemos desarrollarnos en varias áreas como el turismo o como empresarias, pero es importante crear una fuente de conocimiento para postular a proyectos en interculturalidad, técnica mapuche, hierbas de apoyo a la salud, etc. Contar con una institución de educación superior debe ser para nuestros jóvenes, pero también para el rescate de la cultura y la capacitación a los adultos”.
La metodología del taller consistió en la conformación aleatoria de dos grupos focales que se desarrollaron en paralelo, cada uno con una persona cumpliendo la función de moderador y otra de sistematizador de las principales ideas discutidas, las cuales fueron proyectadas y reformuladas inmediatamente.
El trabajo tuvo un fuerte énfasis en la pertinencia cultural del territorio, que se plasma en las ideas recopiladas. Finalizada la actividad, que contó con una participación activa de los presentes, se pudieron identificar como temas prioritarios a desarrollar la continuidad de estudios el área de la salud intercultural, el medioambiente y sustentabilidad habitacional, el sector productivo en torno al uso consuetudinario del borde costero, la investigación intercultural, la pedagogía intercultural, el reconocimiento y certificación de los saberes tradicionales como componedores de huesos y kimche, la capacitación para adultos del territorio, entre otras.
En el próximo taller que realizará el Centro de Estudios Urbano Regionales de la Universidad del Bío-Bío en la comuna de Tirúa participarán estudiantes de enseñanza básica y media y sus apoderados, para recoger los contenidos cualitativos que debe contener el informe a presentar.