El Premio Universidad del Bío-Bío recayó en Maleny Acuña Vásquez y María Fernanda Cofré Riquelme, quienes recibieron la distinción de manos del prorrector (s) Dr. Aldo Ballerini Arroyo.
Un total de 54 nuevos fonoaudiólogos aportó la Escuela de Fonoaudiología de la Universidad del Bío-Bío, mediante la ceremonia de titulación que supuso la culminación exitosa de una etapa marcada por el esfuerzo personal y la entrega de jóvenes, así como de los propios académicos comprometidos con aportar conocimiento actualizado y formación integral.
El acto se desarrolló en la Sala Schäfer del Centro de Extensión de la sede Chillán y fue presidido por el prorrector (s) Dr. Aldo Ballerini Arroyo, junto con la decana de la Facultad de Ciencias de la Salud y de los Alimentos, Patricia Letelier Sanz; el director de la Escuela de Fonoaudiología, Carlos Rojas Zepeda; la secretaria académica de Facsa, Ximena Sanhueza Riquelme; la jefa del Departamento de Admisión, Registro y Control Académico; el subdirector (s) de Desarrollo Estudiantil, Javier Cea Navarrete; académicos y familiares de los nuevos profesionales.
En la oportunidad, el director de la Escuela de Fonoaudiología, Carlos Rojas Zepeda felicitó a los jóvenes por haber culminado la carrera y además, por confiar en la Universidad del Bío-Bío, la única universidad pública y estatal de la Región del Biobío. “Esperamos haber cumplido con todas sus expectativas, y que se sientan realmente preparados y preparadas, comprometidos para asumir la responsabilidad de trabajar día a día con personas que ven en ustedes una luz de esperanza y de cambio, pero por sobre todo, esperamos que hayan comprendido realmente el sello de nuestra carrera, la responsabilidad social y que sean capaces de aplicarla día a día, tanto en su quehacer profesional como en su crecimiento personal”, aseveró.
El director de Escuela, Carlos Rojas, recordó que dicha unidad, durante sus 10 años de existencia, registra 281 titulados, la gran mayoría desempeñándose en el ámbito laboral propio de la disciplina, y muchos de ellos ya han cursado estudios de postítulo y postgrado en distintas universidades nacionales e internacionales.
“La carrera de Fonoaudiología de la UBB a lo largo de sus 10 años, ha pretendido orientar a sus estudiantes bajo el sello de la responsabilidad social, lo cual se valida a través de su misión, visión, perfil de egreso y plan de estudios. Con ese afán, en el año 2010 se crea un espacio propio para la atención de usuarios, gratuito, denominado Clínica de Estudios de la Comunicación Humana, más conocido como CECH. Este centro de práctica representa un espacio privilegiado para la formación de los estudiantes, proyectándose como un futuro centro de investigación y constituyendo un espacio propicio para fortalecer la vinculación con el medio”, destacó.
Igualmente, el académico Rojas Zepeda expresó que el año 2012 entró en funcionamiento el Centro de Actividades Prácticas (CAP), el que brinda atención gratuita a niños y adultos bajo un sello de acción comunitaria, fortaleciendo un lazo con la comunidad a través de la realización de proyectos de extensión que involucran trabajo grupal con adultos mayores y la asociación con distintas instituciones sin fines de lucro, según dijo.
“Avanzando, en el mes de septiembre de 2013, los docentes de especialidad de la carrera de Fonoaudiología se adscriben al Departamento de Ciencias de la Rehabilitación en Salud, permitiéndole a los académicos trabajar, además de la docencia, en una mayor capacidad de transferencia y divulgación del conocimiento propio de la disciplina, fortaleciendo la investigación, vinculación con el medio y la extensión universitaria. En estos 10 años de trayectoria, nos hemos preocupado entre otros aspectos académicos, por la vinculación con el medio. Así por ejemplo, nuestro Laboratorio de Audiología ha entregado atención en el año 2011 a más de 2 mil niños con hipoacusia o riesgo de hipoacusia pertenecientes a la Junaeb. A su vez, hemos llevado a cabo numerosos proyectos de extensión en los cuales nuestros estudiantes han salido a terreno a trabajar al Hogar de Cristo, a Centros Comunitarios y a distintas escuelas en la Provincia de Ñuble”, evocó el director de Escuela.
También destacó el compromiso y la disposición en la generación de centros de práctica propios, como el Conservatorio de Música Laurencia Contreras, el Servicio Médico Estudiantil de la sede Concepción, el Laboratorio de Audiología y el Laboratorio de Voz, que hoy albergan a más de 10 estudiantes en internado profesional, más estudiantes en pre práctica y prácticas de observación. “En cuanto a la infraestructura y equipamiento, hemos adquirido nuevos equipos, e insumos para reforzar las áreas de habla y deglución, voz y audiología, fortaleciendo a través del uso de tecnologías la docencia y además la investigación, posicionando así a la Escuela de Fonoaudiología en la vanguardia en estas áreas. Todo lo anterior nos valió que en el año 2014 acreditáramos nuestra carrera por 6 años, ubicándonos como la segunda carrera de Fonoaudiología con más años de acreditación a nivel nacional”, expresó.
A lo anterior se suma que la carrera está comprometida con el proceso de Renovación Curricular, en concordancia con las políticas institucionales. De esta manera, da respuesta a los requerimientos y necesidades permanentes de profesionales que se enfrentan a distintos ámbitos de la normalidad y trastornos de la comunicación humana y la motricidad oral. “Así hemos validado un nuevo perfil de egreso, creado una nueva malla curricular que esperamos entre en vigencia en marzo del año 2017. Finalmente en noviembre de 2015 hemos creado el Centro de Titulados Escuela de Fonoaudiología cuya finalidad es crear, mejorar y fortalecer los canales adecuados para la participación conjunta en el quehacer académico entre nuestros titulados y la Universidad”, valoró el académico Carlos Rojas Zepeda.
En el marco de la ceremonia, se hizo entrega de las distinciones institucionales que reconocen a los estudiantes más destacados de la promoción.
El Premio Universidad del Bío-Bío, máxima distinción del nivel de pregrado, destinado a reconocer la excelencia académica, fue para Maleny Acuña Vásquez y María Fernanda Cofré Riquelme, quienes recibieron la distinción de manos del prorrector (s) Dr. Aldo Ballerini Arroyo.
El Premio Escuela de Fonoaudiología recayó en José Manuel Asenjo Sandoval, distinción entregada por el director de Escuela, académico Carlos Rojas Zepeda.
El Premio Desarrollo Estudiantil se otorgó a Ángela Contreras Godoy, quien lo recibió de manos del subdirector (s) de Desarrollo Estudiantil, Javier Cea Navarrete.
Posterior a ello, se realizó la toma de juramento profesional, que fue dirigida por el académico Rodolfo Peña Chávez.
En representación de los egresados, José Manuel Asenjo Sandoval, se refirió a los años de formación vividos en la Universidad del Bío-Bío, evocando una serie de recuerdos y experiencias que fueron marcando la etapa universitaria.
El marco musical fue aportado por la pianista y fonoaudióloga egresada de la Universidad del Bío-Bío, Wilma Alarcón Arias.
Tras la ceremonia, académicos, los nuevos profesionales y sus familiares, compartieron un cóctel dispuesto en la Sala Marta Colvin del Centro de Extensión.