Como parte de un proyecto piloto, la Escuela de Arquitectura de la Universidad del Bío-Bío, UBB, firmó un convenio conjunto con la Seremi del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, de la Región, con el fin de apoyar el trabajo realizado por estos en tres barrios; Quinchamalí, en Chillán; Bellavista, en Tomé y El Golf, en Concepción. En los cuales un centenar de estudiantes de la carrera, de primero a quinto año, desarrollarán sus proyectos.
En el lanzamiento del mismo la directora general de Relaciones Institucionales, Maureen Trebilcock, manifestó, “esto va a contribuir al trabajo de recuperación de los barrios, espero que todas las ideas que surjan en el proceso sean un aporte a nuestra Región y a la calidad de vida de nuestros habitantes, además que sea enriquecedor para la formación de nuestros estudiantes, porque tampoco estamos acá sólo para entregar un título, sino que creemos que en la formación también está la dimensión de formar ciudadanos, eso es lo que llamamos la vinculación con el medio. Me alegro que este equipo de académicos y profesionales de la Seremi se hayan animado a este desafío único en la Escuela de Arquitectura y espero tenga el mejor éxito”.
Al respecto el secretario técnico regional del Programa de Recuperación de Barrios y ex alumno de la UBB, Álvaro Rojas, comentó, «Para nosotros es un privilegio como ministerio el poder concretar esta acción en conjunto, además quiero agradecer a esta Universidad, que también es mía, y me alegra el poder haber firmado este convenio que se trabajó por cerca de dos años, para que efectivamente el resultado fuese lo mejor posible. Nosotros también queremos aprovechar toda la capacidad creativa de este centenar de cabezas y corazones que participarán del proyecto, para recoger las mejores ideas y propuestas que nosotros podamos llevar a nuestros barrios, así también ofrecerles la oportunidad de enterarse en la forma que estamos trabajando, hoy en día ya no se puede hacer un diseño desde la oficina, ya no es conveniente ni prudente hacerlo así».
“La idea no es transformarnos simplemente en receptores de solicitudes, sino que conocer qué espera la comunidad de esto, que sean profesionales que recojan los sueños de los territorios para realizar mejores propuestas, saber interpretar lo que ellos sueñan y necesitan. Nosotros trabajamos en función de un plan maestro que está compuesto de una serie de iniciativas de orden más de infraestructura, para generar el escenario que nos permita responder a la necesidad del territorio, tiene una coherencia lógica entre todas las partes, es una mirada integral del barrio y plan de gestión social”, puntualizó Álvaro Rojas.
En la oportunidad los cerca de cien estudiantes de la Escuela de Arquitectura, pudieron ver en profundidad, con presentaciones de los equipos de trabajo de los tres barrios, en detalle el trabajo que se ha realizado en estos y los planes a futuro que tienen en los mismos, para así quedar más interiorizado en los barrios en los cuales trabajarán, los cuales pudieron escoger libremente en una instancia previa.
Por su parte la directora de la Escuela de Arquitectura, Claudia King, comentó “lo que harán ahora es un gran privilegio, hace tiempo que no se llevaban a cabo talleres verticales por tanto espero que aprovechen la oportunidad, esto nos llevará a aportar al crecimiento regional. Los arquitectos y los estudiantes de universidades estatales no sólo trabajamos por ideales sino que somos capaces de trabajar por la gente”.
Además el investigador y académico de la Escuela de Arquitectura, a cargo del programa “Talleres de Barrio”, Hernán Ascuí, explicó que, “nos interesaba trabajar con esta Seremi, porque una de las habilidades que queríamos desarrollar en los alumnos es la capacidad de poder incorporar a los usuarios o habitantes dentro del proceso de diseño. Reforzar la idea de co-construcción, incorporando a todos los agentes que son parte del contexto para llegar a una solución más ajustada a sus necesidades, no desde tú mirada cuáles son esas características especiales del contexto, sino recibiendo de las propias personas y los intereses que ellos van identificando”.
Cada grupo de trabajo cuenta con diez o doce estudiantes, entre primero y quinto año, y son tres grupos por cada uno de los barrios, “nuestro interés también es ampliar la diversidad de esta comunidad de aprendizaje que tenemos instalada dentro de un taller, por tanto ampliar ese debate crítico en alumnos que están en distintos niveles, de manera que crucen sus miradas y se genere una oportunidad de aprendizaje mucho más amplia en esa mirada que se complementa entre sí. Además los profesores de los talleres estaremos rotando entre los grupos, por tanto también tendrán una retroalimentación de estos ocho profesores de los diversos niveles que generan una experiencia nueva para ellos”, expresó Hernán Ascuí.
Los tres grupos de los barrios pudieron hacer un recorrido el pasado viernes, por los respectivos sectores escogidos, para interiorizarse más del trabajo a realizar.
*Las fotografías dan cuenta de parte de lo que fue el recorrido de los estudiantes de la UBB por el barrio El Golf, emplazado en el sector de laguna redonda, en Concepción.