Alumnos de Pedagogía en Historia y Geografía se aliaron con la Organización Estudiantil Cuerpo Violeta, para invitar a la Fundación Transitar. Después de la exhibición del documental “Niños Rosados y Niñas Azules”, hubo un diálogo abierto.
Por iniciativa del Centro de Estudiantes de Pedagogía en Historia y Geografía, además de la Organización Estudiantil Cuerpo Violeta, en dependencias de la Universidad del Bío-Bío se desarrolló la exhibición y posterior conversatorio del documental “Niños Rosados y Niñas Azules”, que trata acerca de las realidades familiares y sociales que enfrentan los hijos transexuales a lo largo de sus vidas.
El material audiovisual pertenece a la Fundación Transitar y data de 2015. Gracias al apoyo de la Dirección de Desarrollo Estudiantil en Chillán, justamente con este grupo se contactó la coordinación de este evento, según comentó Susana Parada, miembro de ambas entidades anfitrionas. “Este conversatorio se enmarca en la temática que trabaja Cuerpo Violeta y la vocalía de género de la Federación de Estudiantes de la UBB, que tiene que ver con la perspectiva de género”, señaló la estudiante.
La actividad contó también con la presencia de Evelyn Silva, presidenta de la Fundación Transitar. “Queremos educar la temática, porque el documental por sí solo no tendría ningún contexto educativo si no sensibilizamos, porque además el documental ya fue hecho hace un año. La niñez trans avanza muy rápido y los niños ya van a años luz de lo que habíamos grabado en ese minuto”, advirtió.
Además la líder hizo hincapié en compartir este material con las generaciones jóvenes, como una semilla que germine la paulatina inserción de los transgéneros en distintos ámbitos de la sociedad. No obstante, Evelyn evaluó de buena forma los grandes avances que ha habido en este aspecto durante la última década.
Silva acudió a la actividad junto a su hija de 7 años, quien es transgénero desde los 4, y que se desarrolla libremente en su condición. “Desde la época en que nosotros partimos hasta hoy día ha habido muchísimos avances, porque mi hija vive tranquilamente dentro de unos espacios medianamente protegidos, pero siendo respetada con su identidad de género, como niña trans”, relató la madre.
