Desde la Dirección de Recursos Humanos dieron a conocer los resultados de la encuesta de riesgos psicosociales realizada el pasado 26 y 27 de octubre, y donde destaca positivamente la dimensión denominada trabajo activo y desarrollo de habilidades, que se refiere a la percepción de las posibilidades de desarrollo que tiene una persona. Es importante destacar que la participación de los funcionarios superó lo exigido por el Ministerio de Salud, teniendo un 81% en sede Concepción, y un 82% en sede Chillán.
En la aplicación de la encuesta, según comentó el equipo coordinador en la sede Concepción, se analizaron 23 unidades de análisis, y en la sede Chillán 12, considerando la dependencia y proximidad geográfica, ya que es la cercanía donde se produce una mayor interacción y, por ende, mayor posibilidad de conflicto. La encuesta evalúa cinco dimensiones; exigencias psicológicas, trabajo activo y desarrollo de habilidades, apoyo social en la empresa y calidad de liderazgo, compensaciones, y doble presencia.
Tal como explica el coordinador de la Sección de Desarrollo de competencias, estudios y Desarrollo organizacional, 
Alejandro López, “en líneas generales existe un buen clima laboral”. No obstante se notaron alteraciones en tres dimensiones, siendo una de ellas la doble presencia que consiste en la influencia de las preocupaciones de trabajo y la carga del trabajo doméstico. Ello, dice la psicóloga de Recursos Humanos, Estela Drake, “es comprensible por la multiplicidad de roles que enfrentan hoy las personas”.
Otra dimensión sensible en cinco unidades de Concepción y tres de Chillán es la de apoyo social en la empresa y calidad de liderazgo, que se refiere a la “claridad o conflicto de rol, calidad de liderazgo, apoyo social, posibilidades de relaciones sociales que brinda el trabajo y sentimiento de grupo dentro de la organización.
Por último, la dimensión de compensaciones, entendida como la retroalimentación por parte superiores, inseguridad en el empleo, perspectivas de promoción o cambios no deseados, reflejó riesgo alto en dos unidades y medio alto en tres unidades, en tanto Chillán sólo se notó riesgo en dos unidades.
Los pasos a seguir manifiesta Alejandro López, es saber cómo “generar una Universidad donde las personas se sientan más reconocidas y apoyadas en sus labores y donde se genere un mayor sentido de pertenencia en aquellas unidades que presentan aún dificultades. La tarea se realizará por distintas vías: actividades de focus group, talleres; rediseño de información y campañas de difusión en distintas temáticas así como acciones puntuales en las distintas unidades”.
