En la Universidad del Bío-Bío tuvo lugar la vigésima octava versión de la Conferencia Académica Permanente de Investigación Contable (Capic), que abordó el tema «La ética como pilar de la formación contable», del 19 al 21 de octubre.
La actividad fue organizada por el comité de la Capic y de la Facultad de Ciencias Empresariales (Face) de nuestra Universidad. El encuentro reunió a académicos, investigadores y estudiantes de las universidades chilenas y extranjeras, así como autoridades regionales e institucionales que participaron en la ceremonia inaugural, exposiciones, talleres y plenario para analizar los avances y desafíos en el área.
La ceremonia inaugural contó con el saludo del decano de la Facultad de Ciencias Empresariales, Benito Umaña, a través de un mensaje audiovisual. Posteriormente, el secretario académico de la Face, Manuel Crisosto, destacó la relevancia de la actividad y el interés que genera en otros países, lo que se reflejó con la participación de Perú, Colombia y Argentina. Subrayó que la UBB fue por segunda vez anfitriona de la Capic, lo que “habla de la permanente preocupación de la Facultad y de la Universidad del Bío-Bío por generar y apoyar espacios de intercambio de conocimiento que enriquezca a la comunidad académica, a nuestros estudiantes y a la sociedad”, aseveró.
Por su parte, el presidente del directorio de la Conferencia Académica Permanente de Investigación Contable, German Pinto Perry, señaló que la ética es el parámetro para evaluar las costumbres y tiene un papel fundamental que jugar en el ejercicio profesional y académico de los cultores de la disciplina contable. Es por ello que la Capic está preocupada del tema ético y esperamos que los frutos de estas preocupación sean aquilatados por la sociedad, pues Capic así como la contabilidad como ciencia social están llamadas a dar respuestas a la sociedad. Ese es el gran desafío que nos convoca”.
Durante la jornada inaugural se entregó el Premio Ruth Marambio Casanova, el que recayó en el académico de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, David Cademartori, quien agradeció al directorio de la Capic por el reconocimiento y señaló que recibió el premio en nombre de la Escuela de Comercio de su Universidad, la más antigua de Chile, con casi 90 años en la formación de profesionales contadores. Dedicó el premio a sus colegas, estudiantes y profesores que lo ayudaron a crecer académicamente.
La clase magistral abordó el tema ”La Importancia de la industria de la conducta ética en el desempeño profesional”, a cargo del director ejecutivo del Consejo Regional de Contabilidad del Estado de Sao Paulo, Brasil, Claudio Bifi.
Un balance positivo de la Capic 2017 realizó el director del Comité Organizador y director de Escuela de Ingeniería Comercial, Cristián Muñoz, quien afirmó estar satisfecho con el desarrollo del congreso contable, lo que ratifica la confianza que tiene esta organización en nuestra Institución. “Esto fue corroborado con un hecho inédito, pues por primera vez tenemos a dos miembros de nuestra Facultad formando parte de los órganos directivos: la directora del Departamento de Gestión Empresarial, Paz Arias, como miembro del Directorio; y el director de Finanzas y Administración, Fernando Morales, como miembro del Comité Técnico. Es un reconocimiento a las capacidades de nuestros académicos”.
Igualmente, Cristián Muñoz destacó la calidad de los trabajos presentados, donde los ganadores en las categorías Investigación y Ensayo fueron investigadores provenientes de Argentina y Colombia, respectivamente.
Respecto al tema en el que se centró el análisis de esta versión, enfatizó que “en la academia nos estamos preocupando de cómo podemos mejorar los estándares técnicos, pero adicionalmente avanzamos en cómo convertimos la ética en una acción normal, tanto del aula como de la vida de los profesionales, lo que significa que nos estamos preocupando de la parte más débil en la formación en general y ese es el principal avance, porque en temas técnicos hace bastante tiempo la profesión se ha internacionalizado, lo que ha hecho que con las normas que se ejecutan sean de carácter global, pero en la ética hay cosas por hacer”, concluyó.