Exitosa fue la presentación del Proyecto de Extensión Relevante que realiza el Centro de Investigación e Intervención Social de la Escuela de Trabajo Social UBB, en conjunto con las Oficinas de Protección de Derechos de Ñuble. La iniciativa, denominada “Formulación participativa de la Política Local de Infancia y Adolescencia (Plia) y Desarrollo de Modelo de Acompañamiento Familiar Comunitario (AFC) en comunas de la nueva Región de Ñuble”, involucra actualmente a las 18 comunas que quisieron adscribirse.
La actividad contó con el saludo del decano de la Facultad de Educación y Humanidades, Marco Aurelio Reyes, las presentaciones del director de la Escuela de Trabajo Social y encargado del proyecto, Héctor Vargas, y la abogada Marcela Molina, además de la asistencia de alcaldes, así como del coro de señas de la Escuela Rosita O´higgins de Chillán.
Con este importante proyecto se pretende generar la vinculación bidireccional, según explicó el director de la Escuela de Trabajo Social, y consiste en que “como Escuela se apoye en la formulación de la política pública, así como recoger información para desarrollar reflexiones que se publicarán en investigaciones, las que principalmente tengan un impacto en la realidad, en la comunidad. A eso apuntamos”. Con ello “cada comuna se pone de acuerdo para determinar qué quieren conseguir con su población infantil en términos de desarrollo, protección y promoción de derechos, convivencia, y sobre todo en lo concerniente a su felicidad”, puntualizó Héctor Vargas.
El alcalde de Quirihue, Richard Irribarra, manifestó que “es una necesidad imperiosa donde podemos trabajar de buena forma. Queremos que las preocupaciones de las autoridades den frutos y se refleje en lo que ahora estamos construyendo”.
En tanto, la abogada Marcela Molina, especialista en el Instituto Nacional de Derechos Humanos, explicó a los presentes la importancia de adelantar el trabajo ante una exigencia internacional, a raíz de los distintos compromisos que ha suscrito nuestro país. “Felicito la iniciativa porque ya están articulados. Que esté detrás una universidad de gran prestigio es muy bueno. Pasa que he visto pocas políticas que realmente tomen en cuenta a los niños, ya que el adultocentrismo es el gran problema. Si no levantamos la opinión de los niños y vemos cómo les afecta a ellos, no tiene sentido, sería un papel, una firma y una foto”, afirmó la profesional.