Cinco estudiantes de la Universidad del Bío-Bío levantaron el primer muro impreso en 3D, paramento de hormigón de aproximadamente 100 cms. de largo, de 5 a 6 cms. de espesor y 60 cms. de altura, que constituye la primera experiencia en elementos constructivos impresos en Chile.
Por Dagoberto Pérez.
Después de varios meses de experimentación, bastaron 20 minutos de impresión para que Stefanie Saravia, Natalia Yévenes, Patricio Carrasco y Javier Novoa, alumnos de Ingeniería en Construcción, y Miguel Reyes, de Arquitectura, construyeran el primer muro impreso en 3D del país, tecnología que se perfila como la última innovación de la industria de la construcción.
El desarrollo de los estudiantes se enmarca en la preparación de la Universidad del Bío-Bío para instalar un equipo robotizado de impresión 3D alimentado por una bomba de hormigonado de última tecnología. El robot, que funcionará con un riel de largo alcance, se está fabricando en Alemania y se trasladará prontamente al país para permitir realizar construcciones impresas de hasta 50 m2.
Esta instalación, única en Latinoamérica, introducirá la nueva tecnología de construcción por impresión 3D que está emergiendo en todo el mundo por su gran productividad, uso de eficiente de los recursos y menor impacto ambiental.
Dra. Claudia Muñoz, afirmó que, “esta tecnología permitirá desarrollar nuevos componentes y sistemas constructivos, con plazos reducidos, menor uso de recursos, menor impacto ambiental, menor accidentabilidad laboral, mayor eficacia y versatilidad”.
Agregó que el equipo podrá aplicarse para realizar viviendas masivas y edificios comerciales, como también otros de diseño de mezclas optimizadas de hormigón para su prospección a mayor escala de prototipos de procesos constructivos.
Dr.Rodrigo García, docente e investigador, comentó, “estamos en el amanecer de un cambio importante en el rubro de la construcción. La NASA ya tiene decidido que las próximas estaciones en Marte se realizarán con esta tecnología, y está experimentando con materiales y robots autónomos para ejecutarlas. También, una empresa italiana está levantando una impresora que construya poblados de manera continua con el mismo material del lugar. Por ello, es tan relevante comenzar a avanzar en el uso de esta tecnología en nuestro país”.
Stefanie Saravia, una de las estudiantes que desarrolló el muro, señaló que, “desde un comienzo el proyecto nos resultó un desafío muy interesante por su grado de innovación y por las grandes interrogantes que nos surgieron con respecto a los alcances técnicos”.
“A la fecha, y después de casi un año de investigación y de confección de mezclas de prueba en laboratorio, hemos logrado un avance significativo en el estudio del comportamiento del hormigón con estándares de extrusión y que cumpla con todas las características para ser implementado en impresión aditiva”, agregó.
El proyecto de la UBB cuenta con el apoyo del programa Construye 2025, impulsado por Corfo, del Centro Interdisciplinario para la Productividad y Construcción Sustentable y de las empresas Cementos Bío-Bío, Ready-Mix y Sika.
