Un concurrido e histórico encuentro de exalumnos, cerró la semana del 50° aniversario de la Escuela de Arquitectura, que contó con participación de sus académicos, funcionarios, alumnos y exalumnos de la primera hasta la más reciente generación de arquitectos.
Por Fernando Mejías.
Como un momento histórico fue calificada por sus organizadores y asistentes la conmemoración de los 50 años de la Escuela de Arquitectura UBB, que estuvo marcada por las actividades de su semana aniversario y por el encuentro de sus exalumnos y estudiantes, que compartieron experiencias en el marco de las celebraciones organizadas para la ocasión.
En la ceremonia central realizada en el Hall del Pilar de la Escuela el pasado viernes,e l director de la Escuela de Arquitectura y académico de la Facultad de Arquitectura, Construcción y Diseño UBB, Jaime Jofré, comentó que fue una celebración muy emotiva, por el recuerdo de los fundadores y también de los exalumnos que pasaron por la carrera. “Los maestros y profesores que ya no están acá nos entregaron un legado inmenso, no solo conocimiento, también una manera de ser, de ver y estar en el mundo y esos recuerdos son el punto de origen de las actividades que hemos tenido estos días”.
El programa de celebración de una de las escuelas más antiguas del país, contempló actividades como un encuentro entre exalumnos y estudiantes, exposición de fotografías históricas, una ceremonia en el hall del pilar de la escuela y la tradicional fiesta de disfraces.
La arquitecta de la generación 1970, Mirta Biñolo, recordó que “todo este espacio de la escuela actual eran solo talleres, es positivo ver estos espacios modernos y bien equipados. Nosotros tuvimos un enfoque muy social por la época en que nos tocó vivir, muy solidario, en este momento veo a la arquitectura en general con un enfoque más marcado hacia los negocios, creo hay que volver a una mirada más social de la arquitectura, más cercana a la comunidad”, agregó.
por su parte, Claudia Benavente, arquitecta egresada el año 2000, quien trabaja en Boloña, Italia en una oficina de arquitectura, comentó sobre la carrera: “si hay algo que me ha servido mucho ha sido tener una formación rigurosa en la proyección y la geometría, creo que ahí marcamos una diferencia como escuela. Trabajar en otro país es complicado, pero si no hubiera tenido la formación sólida de la escuela habría sido muchísimo más”.
“Estamos felices, creemos que ha sido un momento histórico de reunión de los ex alumnos, que se habían hecho antes, pero nunca con una convocatoria tan importante”, explicó Maureen Trebilcock, parte del comité coordinador de la celebración. “Creo que hoy ha sido un gran día, los arquitectos tenemos una sensibilidad especial con los espacios, que dinamizan y propician los encuentros y hemos aprovechado el hall del pilar de nuestro edificio para reforzar ese sentido de comunidad”.
Finalmente, Jaime Jofré reflexionó sobre el futuro de la Escuela. “Proyecto a una Escuela mucho más interdisciplinaria, debatiendo temas de avanzada, situándose en la discusión última y más contemporánea de la arquitectura, aspiro a que estemos entre las 3 primeras escuelas del país en pocos años más. También la veo unida, muy comprometida con los problemas del país, aquí se debate sobre el pueblo mapuche, la diversidad sexual, la integración de las nuevas nacionalidades, es una escuela del Estado, comprometida con el devenir del país y la veo más inclusiva, más integrada, pendiente y aportando lo más que se pueda al país, con sentido público y ocupada de hacer de la arquitectura un bien social”, concluyó.