Fomentando la Autonomía para la Inclusión Laboral se denominó la jornada orientada a padres y familiares de personas en situación de discapacidad de Chillán. La actividad fue organizada por la Escuela de Fonoaudiología, a través del proyecto de Extensión “Inclusión social y laboral en personas en situación de discapacidad. Abordaje interdisciplinar para el cumplimiento de la Ley N° 21.015”, que lidera la académica Marcela Sanhueza Garrido.
La jornada consideró un taller desarrollado por la académica de la Escuela de Trabajo Social de la Universidad del Bío-Bío, Dra. Youcelyn Rivadeneira Valenzuela, que consideró a padres y apoderados de personas en situación de discapacidad de Centro Laboral UNPADE, Fundación ELEVA y Centro Laboral San Rafael de Chillán.
La jefa del proyecto, académica del Departamento de Ciencias de la Rehabilitación en Salud, Marcela Sanhueza Garrido, explicó que éste tiene como objetivo iniciar un proceso que fomente las habilidades sociales, comunicativas y laborales de personas en situación de discapacidad cognitiva, así como de sus familias, para propender a que la inclusión laboral sea real y permanente en el tiempo.
Marcela Sanhueza precisó que la nueva ley de inclusión laboral en Chile, vigente desde el 1 de abril de 2018, incentiva y amplía las posibilidades laborales de las personas registradas en situación de discapacidad o que sean asignatarias de pensiones de invalidez, debiendo las empresas con 100 o más trabajadores disponer del 1% de su dotación para tales efectos.
Sin embargo, la Ley de Inclusión Laboral 21.015 fija los 26 años como edad límite para que las personas puedan suscribir un Contrato de Aprendizaje, requisito que les permite prepararse en centros específicos para laborar en una institución o empresa. “Esto deja a personas en situación de discapacidad, específicamente cognitiva, sin la posibilidad de asistir a centros laborales o educacionales, obligándolos en algunos casos a volver a sus hogares y quedar al cuidado de sus padres, limitando al mínimo sus interacciones sociales y posibilidades de desenvolverse en otros contextos que no sean el familiar”, precisó.
La académica Marcela Sanhueza aseveró que en virtud de lo anterior, a través del Proyecto, se ha propuesto contribuir con el propósito de la Ley: “Desde un abordaje fonoaudiológico y social es fundamental el trabajo que podamos realizar en conjunto. Ciertamente, no siempre existen los medios, los recursos y acompañamientos necesarios para que la inclusión se haga efectiva. Es por ello que solo una parte de las personas logra insertarse laboralmente y mantenerse en el tiempo, a pesar del esfuerzo de las familias e instituciones”, ilustró.
El taller de la Dra. Youcelyn Rivadeneira giró en torno a la presentación denominada “Familia, emociones y síndrome de Down”. La académica precisó que el título obedece a que en virtud de su experiencia con familias con hijos o hijas en situación de discapacidad, resulta imprescindible considerar el ámbito de las emociones.
“Es necesario considerar cómo influyen las emociones en el desarrollo, no solo de nuestros hijos, sino cómo las emociones son fundamentales para nosotros y nosotras como seres humanos”, aseguró.
El proyecto de Extensión contempla actividades periódicas semanales en el Centro de Actividades Prácticas (CAP) de la UBB, así como en el Centro Laboral San Rafael.