La primera Escuela de Primavera organizó el Magíster en Ciencias Biológicas de la Facultad de Ciencias, con el objetivo de difundir a la comunidad aspectos científicos del posgrado mediante charlas que dieron a conocer las líneas de investigación de los académicos/as de su claustro y las experiencias de sus graduados/as.
La ceremonia inaugural contó con la bienvenida del decano de la Facultad de Ciencias, Dr. Juan Carlos Marín, quien señaló que “es muy grato hacer por primera vez esta Escuela de Primavera como una forma de mostrar lo que hemos hecho y lo que queremos ser”. En su calidad de profesor del Magíster reconoció sentirse orgulloso del mismo y de haber tenido la posibilidad de ver el crecimiento de los y las estudiantes que llegan con la esperanza de convertirse en grandes científicos, siendo este el primer peldaño para un doctorado y así continuar con esta carrera de hacer ciencia.
Igualmente, la directora de Postgrados de nuestra Universidad, Dra. María Luz Muñoz, manifestó que la educación a distancia ha sido un desafío para las instituciones de educación superior en el periodo de pandemia, sin embrago, “también se ha transformado en una gran oportunidad para avanzar en la internacionalización de los programas de posgrado aumentando la colaboración interuniversitaria, generando redes y fortaleciendo la vinculación entre investigadores de los distintos campos disciplinares. En este sentido, el Magíster en Ciencias Biológicas, desde su creación el año 2014, ha mantenido su compromiso permanente con la formación avanzada en su área fomentando la independencia y el pensamiento analítico y reflexivo en los estudiantes”.
El director del Magíster, Andrés Rodríguez, valoró la diversidad de temas científicos abordados durante las 14 ponencias, lo que significó un trabajo colaborativo multidisciplinar del Departamento de Ciencias Básicas, por lo que agradeció al Comité Académico del programa por la ayuda en la organización y la ejecución del seminario.
Asimismo, destacó que un aspecto importante de labor científica es vincular los trabajos de investigación con la comunidad, siendo este tipo de iniciativas las que permiten llegar a un público más amplio, con el objeto de compartir el conocimiento, que significa “entender la vida desde un punto de vista proactivo, es el hecho de comunicar de forma abierta tu aporte para que otros puedan disponer de ello, generando crecimiento y retroalimentación. El conocimiento es una de las máximas fuentes de poder que tiene el hombre, poseerlo o dominarlo por completo es imposible, pero sí es importante estar en constante aproximación con respecto a él”, aseveró.
Tras tres días de conferencias, sostuvo que esta fue una “experiencia excelente y novedosa dentro de la Facultad, ya que, si bien existen seminarios, éstos tienden a estar enfocados en un tema en particular, mientras que nuestra divulgación tuvo un enfoque transdisciplinar, algo que actualmente es indispensable para poder desarrollar ciencia en nuestros días. Espero que con esta experiencia, este tipo de encuentros sean más comunes dentro de los departamentos de la Facultad”.
Agregó que las nuevas incorporaciones al claustro, junto al proyecto Ciencias 2030, lo han llevado como director a la “convicción de que el Magister en Ciencias Biológicas debe evolucionar y desarrollar a futuro un troncal biotecnológico, en el cual estos nuevos académicos y académicas puedan desarrollar sus ideas, mejorando aún más transversalidad del programa”.
También relevó la participación de graduados/as en esta primera versión de la Escuela, la que contribuyó a generar las ideas colaborativas con el cuerpo académico, recoger sus experiencias e integrar nuevas herramientas de desarrollo.