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Publicado el 19 de agosto del 2016

Conmemoran 50 años de la fundación de la sede Ñuble de la Universidad de Chile antecesora de la UBB

Por Cristian Villa Rodríguez
Etiquetas: Educación, Humanidades
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El decano de la Facultad de Educación y Humanidades de la UBB, Marco Aurelio Reyes Coca, presidió acto que contó con la participación de autoridades locales, antiguos académicos, exalumnos y funcionarios. En la oportunidad también se rindió tributo al dramaturgo y extensionista cultural Enrique Gajardo Velásquez.

Una amplia participación concitó el acto conmemorativo de los 50 años de la fundación de la sede Ñuble de la Universidad de Chile, antecesora de la UBB, hito logrado gracias al esfuerzo y tesón de la comunidad ñublensina y de las autoridades de la época, según expresó el decano de la UBB, Marco Aurelio Reyes.

El acto se desarrolló en la Sala Schäfer del Centro de Extensión de la UBB y contó con la participación del diputado Carlos Abel Jarpa; el alcalde de Chillán Sergio Zarzar; el decano de la Facultad de Ciencias Empresariales, Dr. Benito Umaña; el decano de la Facultad de Ciencias, Dr. Mauricio Cataldo; Fernando May Colvin; la secretaria académica de la Facultad de Ciencias de la Salud y de los Alimentos, Ximena Sanhueza; el secretario académico (s) de la Facultad de Educación y Humanidades Carlos Ossa Cornejo; Gabriel Figueroa Saavedra, ex vicerrector de la sede Ñuble de la Universidad de Chile, antiguos funcionarios, exalumnos y académicos del centro universitario de la época.

Reseña histórica

En la oportunidad, el académico Marco Aurelio Reyes presentó una reseña histórica de la Universidad de Chile sede Ñuble, donde dio cuenta de la serie de hechos protagonizados por la comunidad ñublensina de la década de 1960, que clamaba por contar con un centro universitario que permitiera el desarrollo de la juventud que anhelaba proseguir su formación en la educación superior, y que debido a las escazas opciones existentes en Chillán debían abandonar a sus familias y dirigirse hacia otras ciudades con el costo económico que ello implicaba.

Al comenzar su reseña, el decano Marco Aurelio Reyes comentó que la actividad conmemorativa permitía “revivir afectos”, sobre todo al volver a encontrarse con quienes fueron protagonistas de aquella etapa. “La emoción, el nerviosismo, los recuerdos, se vienen a la mente al participar con tantos rostros amigos, con los cuales ya hemos trazado una trayectoria importante de nuestras vidas. Encontrarme con Gabriel Figueroa, que fue vicerrector de la Universidad de Chile de aquel entonces; con don Fernando May Colvin, hijo de doña Marta Colvin y Fernando May Didier, familia importante en la historia de nuestra institución de educación superior en Chillán, y tantos otros”, aseveró el decano.

El historiador Reyes Coca, explicó que el Centro Universitario de Ñuble es el antecedente de la sede Ñuble de la Universidad de Chile, luego transformada en el Instituto Profesional de Chillán (IPROCH), actual Universidad del Bío-Bío.

Desde su origen el objetivo estaba claro: “Contribuir al desarrollo económico, social y cultural de la provincia de Ñuble, de la región y de Chile”.

El decano Marco Aurelio Reyes explicó que la movilización de la comunidad de Ñuble en torno a dicho objetivo fue notable, y se contó con el liderazgo indiscutido del Intendente Provincial Roberto Casanueva y del alcalde Abel Jarpa, junto con otras personalidades y representantes de todas las instituciones públicas y privadas de la provincia.

El académico Marco Aurelio Reyes precisó que el movimiento comenzó a concretar acciones a partir del 10 de agosto de 1965. “En esa fecha se entrevistaron con el entonces Rector de la Universidad de Chile, Eugenio González Rojas, el alcalde, parlamentarios y destacados personeros de Chillán. La máxima autoridad de la universidad hizo suyos los anhelos de los representantes de Ñuble. El 29 de enero de 1966 se dictó la Ley N° 16.419 que señalaba los impuestos que la Provincia de Ñuble pagaría en bien de tal iniciativa, y el aporte que el Congreso Nacional efectuaría para la acción preuniversitaria. La Sociedad Musical Santa Cecilia facilitó las dependencias del edificio Casa del Arte, ubicado frente a la Plaza de Armas para la instalación del Centro Universitario, en recuerdo de su fundador Otto Schäfer Hofmann”, evocó el historiador local.

“El Centro abrió sus puertas el 11 de abril de 1966 siendo su primer director Alfredo Valenzuela Cancino y acogiendo a una matrícula de 439 alumnos, quienes optaron por carreras tales como Técnico Artístico, Técnico Administrativo, Técnico Agrícola, Orientación para el Hogar, Pedagogía en Enseñanza Básica, Pedagogía en Matemática, Pedagogía en Inglés y Pedagogía en Educación Musical”, aseveró el historiador Marco Aurelio Reyes.

Recuerdos de Fernando May

En la ocasión, Fernando May Colvin, hijo de Fernando May Didier, quien donara los terrenos del actual campus homónimo, compartió con los presentes el discurso leído durante el acto de donación del denominado fundo El Mono durante la década de 1970.

“En nombre de Fernando May Didier, de sus 3 hijos, 12 nietos, y de su primer bisnieto, (trasladen esto a 5 décadas atrás), hago entrega oficial de estas tierras y de todo lo en ellas contenido, como la donación que esta familia hace a la Universidad de Chile en Chillán… La larga historia que encierra sólo el señalar que miembros de la familia han nacido, vivido y muerto en un mismo terruño, nos indica tradición convertida en impulso vital que la apega a la tierra, a tal punto de no saber ya si estas plantas y estos árboles han crecido y florecido en esa tierra o en nosotros mismos. Es por ello que para engrandecer esta tradición y este amor, nuestro padre Fernando May, ha concebido un sueño, tiene una esperanza y razones, que se forme aquí, en este lugar, la más seria y grande fuente de estudios universitarios del país, teniendo como punto de partida esta donación”, expresó Fernando May Colvin.

“Por otra parte, aunque nos excedamos en nuestro parco decir cotidiano, pero por encargo expreso de Fernando May, debo establecer que, como testimonio vivo de gratitud hacia la Patria de sus descendientes, sus amigos, vecinos y colaboradores, él hace esta donación para realizar las aspiraciones de la juventud y de Chile. Señoras y señores, llegó el momento, se va el patrón viejo, se va una tradición familiar, que entre el joven vicerrector, que nazca ahora una nueva tradición zonal. Tierra, se buena otra vez”, concluyó May Colvin.

Alcalde Sergio Zarzar, exalumno de la sede

El alcalde de Chillán, Sergio Zarzar Andonie, en su calidad de ex alumno de Pedagogía en Enseñanza Básica mención Educación Física de la antigua sede, destacó el rol social e histórico que cumplió la Universidad en aquel tiempo, y reconoció el rol jugado por actores de la época para concretar el anhelo de la comunidad local por contar con un centro universitarios. Asimismo, recordó anécdotas y experiencias que marcaron su paso por la universidad. También destacó el legado a la educación superior que supuso la donación de la familia May Colvin. Igualmente tuvo palabras de reconocimiento para el dramaturgo y extensionista cultural Enrique Gajardo Velásquez.

“Quiero saludar a Martita, hermana de don Enrique, quien fue un verdadero maestro. Aunque era Jorge, mi hermano, quien integraba el Instituto de Extensión Cultural de Chillán (INECUCH), en algún momento también grabé con ellos. Hasta hoy guardo con mucho cariño un curso de Locución y Animación, y en ese tiempo nunca pensé que me correspondería hablar tanto en la vida. Hoy no quiero sentirme como alcalde sino como alumno de la Universidad de Chile, y de esta gran prolongación que fue el IPROCH, y la Universidad del Bío-Bío que tanto respeto merece”, aseveró el alcalde.

Discípulos de Enrique Gajardo

Ya en el homenaje al dramaturgo Enrique Gajardo, el poeta Juan Carlos Olmedo, quien viene desarrollando una serie de trabajos de investigación para recopilar y rescatar el legado de Enrique Gajardo, destacó la huella dejada por el maestro Gajardo en el desarrollo cultural de la ciudad de Chillán, desde la creación de Radiodifusión Cultural, programa que se extendió por 50 años, en donde se emitieron más de dos mil programas, principalmente en Radio La Discusión, donde contó siempre con el apoyo del director propietario de la época, Alfonso Lagos Villar.

Su trabajo dejó huellas entre grandes actores egresados del teatro de la Universidad de Chile y de otras, tales como Mario Lorca, Gabriela Medina, Nelson Villagra, Franklin Caicedo, Pedro Villagra, Jorge Gajardo, César Arredondo, entre otros.

“No quedaron registros de las obras de teatro, fuera de esos libretos. En los años ’70 no existía la tecnología de hoy, que todo lo graba, lo registra y lo divulga. Mi labor en el teatro universitario, fue el de un humilde tramoya, cooperando en lo que fuera necesario para darle vida, sonido y luz al escenario. Sonido y música que salía de una vieja grabadora de cintas. Así, aparece en escena INECUCH, el Instituto de Extensión Cultural de la Universidad de Chile. El trabajo de investigación logró recuperar 14 cintas del ciclo sobre la vida de Bernardo O´Higgins Riquelme, siete capítulos, siete horas que nos narran desde el nacimiento de Bernardo hasta su muerte y exilio en el Perú, grabadas en los estudios de Radio La Discusión, con el auspicio del diario, de la Municipalidad de Chillán y de la propia Universidad de Chile”, expresó Juan Carlos Olmedo.

Juan Carlos Olmedo también compartió con los presentes los primeros minutos de las cintas rescatadas emitidas en 1978 en Radio La Discusión. Dichas grabaciones forman parte de un proyecto formulado ante el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. Se espera entregar dicha creación a la Biblioteca Municipal de Chillán, para su preservación y formación del Museo para la Memoria Cultural e Histórica de la ciudad, aseguró el poeta.

Tras las palabras de Juan Carlos Olmedo, antiguos discípulos de Enrique Gajardo recrearon escenas de las múltiples obras representadas bajo su dirección, así como declamaron algunos poemas. Entre ellos se contó a Flory Zúñiga, comunicadora social en Radio La Discusión y actriz del teatro de la Universidad de Chile, sede Ñuble; Víctor Fuentealba, profesor de Inglés, actor del Teatro Experimental y director del grupo Litre; Bernardo Neira, director del Teatro Experimental de Chillán; y Virginia Traub, actriz del Teatro Universitario.

Los actores mencionados escenificaron y declamaron extractos de las siguientes obras: “Un secreto bien guardado”, “Anacleto avaro”, “Vida y milagros de Pedro Urdemales”, “Dulce patria”, “Oda al aire”, “Bernardo O’Higgins Riquelme (1810)”, “Señoras Chilenas”, “Viña”, “La Remolienda”, y “El Secreto”.

Tras dicho homenaje, la académica del Departamento de Artes y Letras de la UBB, Tilma Cornejo Fontecilla, hizo entrega de un reconocimiento a la hermana del dramaturgo, Marta Gajardo Velásquez.

El acto culminó con la presentación del Taller de Música Latinoamericana del Departamento de Artes, Cultura y Comunicación de la sede Chillán.

Cristian Villa Rodríguez

Cristian Villa Rodríguez, Periodista. cvilla@ubiobio.cl 042-2463015

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