Susana González Valenzuela, Nelly Gómez Fuentealba, Gabriel Sanhueza Daroch y Pedro Flores Paredes recibirán este año el Premio a la Excelencia en Docencia en la categoría Formación y Desarrollo de Equipos de Trabajo, con que nuestra casa de estudios reconoce a los grupos académicos que se han dedicado de manera estable y coordinada a acciones de innovación docente, para la incorporación de nuevas prácticas pedagógicas y tecnológicas en el aula. La ceremonia de entrega del galardón tendrá lugar el martes 19 de diciembre, a las 16 horas, en el auditorio Hermann Gamm.
El equipo conformado por los académicos de la Facultad de Ciencias fue distinguido por su trabajo colectivo y colaborativo y su trayectoria consecuente en la implementación de mecanismos y estrategias que permitieron afrontar las altas tasas de reprobación en las asignaturas de Ciencias Básicas de las carreras de Ingeniería de la sede Concepción, a través de la modularización de los cursos.
Al fundamentar su decisión, el jurado subrayó el aporte de la propuesta, su positivo impacto en el proceso de enseñanza y su focalización en el aprendizaje de los estudiantes. Asimismo, resaltó que la repercusión de la iniciativa se evidencia en el incremento de los índices de aprobación y la mejora en los promedios de notas, contribuyendo fuertemente a modificar la cultura institucional en lo que refiere a dictar asignaturas de Ciencias Básicas.
El equipo comenzó a trabajar en 2008, junto con otros profesores de la Facultad de Ciencias, para la formulación de una propuesta tendiente a mejorar el rendimiento académico de los estudiantes. Al año siguiente se adjudicaron el proyecto Mecesup UBB 0809 Plan de nivelación de competencias básicas y genéricas en Ciencias Básicas para estudiantes de Ingeniería Civil de la Universidad del Bío-Bío, consistente en el rediseño modular de los contenidos de los cursos de Matemática y Física, su correspondiente renovación metodológica y su aplicación, como experiencia piloto, a la cohorte 2010 de dicha carrera. En los años siguientes la propuesta se replicó en otros programas de pregrado que imparte nuestra Universidad y que tienen Ciencias Básicas en su plan de estudios.
Los ganadores
Susana González, directora del Proyecto Mecesup 0809, señala que el grupo de trabajo constituido junto con los otros tres galardonados ha logrado afiatarse y persiste en la preocupación por mejorar su labor docente. Hemos participado en diversas capacitaciones y nos reunimos periódicamente para compartir lo que estamos haciendo, afirma. Y agrega: Estamos alineados con el modelo educativo institucional y asumimos que nuestra función es que los alumnos jueguen un rol protagónico en su propio aprendizaje. Los jóvenes que hoy ingresan a la Universidad son distintos y es necesario motivarlos, buscar nuevas formas de enseñarles y de comunicarse con ellos.
La académica confiesa que disfruta de la docencia. Le agrada el contacto con los alumnos y le entusiasma la idea de poder generar un cambio de actitud en ellos, más allá de entregarles conocimiento, dice. Además, me gusta aprender cosas nuevas y la docencia me obliga a estar actualizándome permanentemente, añade.
Confiesa que la obtención del Premio a la Excelencia en Docencia «me emocionó». Es una magnífica noticia que –señala- le genera alegría, orgullo y gratitud hacia la Universidad y la Facultad de Ciencias, por su respaldo. También hacia sus colegas, que han compartido su alegría, y al jurado, que valoró el esfuerzo del grupo de trabajo que integra. Nos anima a perseverar en la idea de innovar y mejorar los procesos de enseñanza, manifiesta.
Nelly Gómez, directora alterna del proyecto, en tanto, expresa que recibe el reconocimiento con humildad, puesto que no hubiera sido posible sin el trabajo y compromiso de cada uno de los miembros del equipo. Advierte que su mayor motivación son los estudiantes. Son lo principal de la Universidad y es nuestro deber adoptar nuevas formas de enseñanza porque los alumnos cambian, anota, añadiendo: Uno se debe también al lugar donde trabaja y el modelo educativo de la UBB requiere de la innovación pedagógica, puesto que se centra en el alumno y el profesor debe constituirse en un facilitador del aprendizaje.
La académica sostiene que la modularización fue un trabajo gratificante y llama a cuidar el plan. A su juicio, es una iniciativa «muy sensible» y su implementación exige que los profesores se comprometan y estén dispuestos a trabajar. Se necesita, además, de mucha coordinación, de tal forma que los alumnos no sean sobre exigidos y los resultados sean los esperados.
Para Nelly Gómez, la docencia no es sólo transmitir conocimiento, que ya es una tarea difícil, sino que abarca también la presentación personal, la manera de expresarse y la actitud más allá del aula. El profesor debe ser un referente, asevera. Tampoco hay que olvidar la investigación, la productividad y el posgrado puesto que todos estos aspectos van ligados. El investigador debe estar con los alumnos, ya que uno y otro se enriquecen en ese contacto, recomienda.
Por su parte Pedro Flores comenta que el premio es «una alegría y un gozo». Es un reconocimiento a una labor de tantos años, indica. Y puntualiza: Agradezco a Dios, a mi familia y al equipo con el que hemos trabajado juntos. Para trabajar en grupo es necesaria la buena disposición de cada uno. Agradezco también al Departamento de Física, que nos dio su apoyo desde el primer momento, y a todos los que cada año se fueron incorporando a este esfuerzo.
El académico añade que, en lo personal, el galardón resulta muy gratificante. Siempre me ha interesado aportar a los estudiantes y, en particular, la modularización de las asignaturas, si bien exige mayor dedicación, ha sido beneficioso para los alumnos. Mejoran los niveles de aprobación sin bajar las exigencias ni afectar el aprendizaje, puesto que requiere que los alumnos estudien en forma constante y le dediquen más tiempo a la asignatura. Y de parte de los profesores demanda, por ejemplo, que los resultados de las evaluaciones se entreguen al día siguiente. La introducción de metodologías activas requiere también diseñar y planificar las actividades.
Flores concluye que las actuales generaciones de estudiantes son distintas a las anteriores, están formados de otra manera, por lo que la innovación es fundamental. Es esencial que el profesor cambie él mismo, que se actualice permanentemente y vaya adecuando su forma de enseñar, asevera.
Finalmente, Gabriel Sanhueza señala que el reconocimiento constituye una doble alegría, aludiendo a que el año pasado también recibió el Premio a la Excelencia en Docencia, en la categoría Individual. En este sentido, precisa que le reconforta compartir esta satisfacción con los demás integrantes del grupo de trabajo, poniendo de relieve el esfuerzo y compromiso personal y colectivo, así como la labor en aula de cada uno.
Sanhueza resalta el aporte del programa de modularización al objetivo institucional de mejorar el desempeño académico de los alumnos. La iniciativa se alinea con el modelo educativo de la UBB y ha permitido a nuestra Universidad alcanzar posiciones destacadas a nivel nacional en el ámbito de la retención estudiantil, dice.
Para el profesor Sanhueza, el galardón obtenido demuestra además la vigencia de su trabajo y le inspira a continuar avanzando en la innovación docente y el uso de tecnologías. Ahora estoy participando en un proyecto con la macrofacultad de Ingeniería, para extender el impacto de este esfuerzo en las carreras de esa área, adecuándolo a los requerimientos de las distintas especialidades, cuenta. Cada día me involucro en nuevos desafíos, combinando la experiencia adquirida con la innovación y la contextualización, finaliza