El Dr. Cataldo relevó medidas adoptadas y los avances registrados en los distintos ámbitos del quehacer universitario y homenajeó con unos instantes de silencio a las víctimas de la pandemia. Para nuestra Universidad, es relevante pensar en cómo seremos capaces de procesar estos inéditos y desafiantes escenarios, dijo.
Este tiempo difícil también ha sido un tiempo de crecimiento y desarrollo institucional, aseveró el Rector al dar cuenta pública del quehacer realizado por la Universidad del Bío-Bío durante el último año. La UBB -agregó- ha vivido importantes transformaciones, algunas de las cuales responden a la situación de contingencia y otras llegaron para quedarse y modelar nuestra experiencia universitaria cotidiana.
Como ejemplos, citó la digitalización de las prácticas académicas, la modernización del proceso de difusión de carreras y la forma en que la Universidad enfrenta los cambios sociales y culturales en marcha. Precisó que, a inicios de 2020, nuestra casa de estudios contaba con un incipiente desarrollo en docencia digital y, en lo que calificó como uno de los desafíos humanos y tecnológicos más importantes de las últimas décadas para la UBB, más de 709 profesores se apropiaron de esta forma de impartir clases. Adicionalmente, nuestra institución destinó más de millones de pesos en chips de conectividad, computadores y tablets para estudiantes, licencias Zoom y adaptación tecnológica.
En cuanto a la promoción de carreras explicó que, en un contexto de brusca disminución de las matrículas en el sistema universitario, se impulsó una estrategia de atracción basada en contenidos y servicios, lo que contribuyó a que 2.364 jóvenes optaran por nuestra Universidad. Además, el proceso de matrícula se efectuó por primera vez en modalidad on line. Con respecto a cómo nuestra Universidad está procesando las transformaciones sociales, en tanto, destacó la creación de la Dirección de Géneros y Equidad. Mencionó igualmente la normativa interna que regula el uso del nombre social para personas trans, la decretación del protocolo para denuncias de acoso, violencia y discriminación de género y la elaboración del diagnóstico de género de la UBB.
Junto con manifestar que, ante el impacto de la pandemia, “el Estado de Chile debe hacer un esfuerzo para acompañarnos financieramente y desde el punto de vista de la gestión”, el Dr. Cataldo indicó que se han promovido medidas de ajustes presupuestarios y de flujos de caja. Asimismo, se diseñó un Plan de Eficiencia Administrativa, que incluye el análisis de la diversificación de ingresos, la reestructuración de pasivos, la revisión de las políticas de aranceles y el mejoramiento de la gestión digital. En la misma línea, gracias al esfuerzo colectivo, se logró apalancar 6 mil 500 millones de pesos mediante la adjudicación de 16 proyectos institucionales.
El rector Cataldo se refirió igualmente a la descentralización de la distribución de los recursos –“el año 2020, apoyamos a las seis facultades transfiriendo un total de 300 millones de pesos para apoyar sus diversos proyectos”, puntualizó-, a los avances en virtualización de la gestión y al plan de fortalecimiento, al alero del cual se formularon tres propuestas asociadas a la contingencia: la potenciación de la virtualización de la Universidad, el fortalecimiento del capital humano y la presencia de la Universidad en las regiones del Biobío y de Ñuble.
En el campo de la docencia, el Rector puso de relieve la elaboración del Protocolo para la Docencia a Distancia, la ampliación de los servicios remotos de bibliotecas, el proceso de evaluación del modelo educativo institucional, la implementación del sistema interno de aseguramiento de la calidad -al que, afirmó, se han incorporado 10 carreras- y los cursos para docencia a distancia del Programa Permanente de Pedagogía Universitaria. Respecto de este último punto, resaltó la alianza con el Instituto Tecnológico de Monterrey. Anunció además el estudio de la oferta académica, para lo cual se convocará a las facultades.
En Desarrollo Estudiantil, la autoridad universitaria subrayó el intensivo apoyo psicosocial y socioeconómicos a alumnos y alumnas, esfuerzo que se tradujo en más de tres mil atenciones telemáticas en distintas áreas, la generación de casi 400 cápsulas audiovisuales sobre cuidado de la salud mental y la firma de un convenio con la Municipalidad de Concepción sobre la misma materia. Además, se habilitó una línea 800 de apoyo a los y las estudiantes. Una ardua labor llevó a cabo también la Unidad de Financiamiento Estudiantil.
En posgrado, destacó la creación de dos nuevos programas: el Doctorado en Ingeniería -en consorcio con las universidades de Talca y de La Frontera- y el Magíster Latinoamericano en Arquitectura. Aludió asimismo al programa piloto de retorno gradual a actividades presenciales, que permitió a tesistas e investigadores concurrir a los laboratorios. En investigación, innovación y desarrollo, puso énfasis en la puesta en marcha de la política de creación artística y en los proyectos adjudicados: 9 Fondecyt regulares y 7 de iniciación, 2 de postdoctorado, 4 Fondef y 2 FIC, además del proyecto de Innovación en Educación Superior, INES 2020. Informó igualmente de un aumento de 13 por ciento, en relación al año anterior, de las publicaciones ISI, Scopus y Scielo.
Con respecto a vinculación con el medio, relevó la adjudicación de un convenio de desempeño para fortalecer este aspecto, la consolidación de la presencia de nuestra casa de estudios en la región de Ñuble y la presidencia del Consejo de Rectores del Biobío y de Ñuble, que le ha correspondido ejercer en este período. Se detuvo asimismo en las ferias, en las actividades de extensión artísticas realizadas durante 2020, entre las que destacó la convocatoria literaria Impresiones y vivencias Covid-19, y en las realizaciones y aportes de la radio y la TV institucionales. Finalmente, el Dr. Cataldo se refirió a los estudios sobre los efectos del teletrabajo y la docencia distancia en académicos/as, estudiantes y administrativos/as y al sistema de recesos especiales que se está aplicando para paliarlos, al paso a planta administrativa y académica, la reforma de los estatutos de nuestra Universidad y la jerarquización docente.
Al concluir su presentación, el Rector agradeció la confianza de la comunidad UBB y al equipo que le acompaña para conducir nuestra Universidad. “Nuestra institución es una comunidad democrática que cobija distintas visiones, donde son bienvenidos el diálogo, la reflexión y las propuestas para proyectarnos hacia el futuro. Después de que juntos pasemos esta tormenta histórica, que nos ha hecho navegar por las aguas más turbulentas de los últimos cuarenta años, deberemos contar con la sabiduría y claridad intelectual, así como con la fraternidad y un sentido del nosotros desplegados al máximo”, sentenció.