La actividad tuvo como principal objetivo enfatizar en la inclusión de estudiantes con capacidades diferentes.
“Mi nombre es ceguera” es el título del libro presentado por su autor en la sede Concepción de la universidad, el profesor y representante de Coalivi Pedro Cortés, a propósito de la celebración del día internacional del libro y la planificación de actividades del Programa de Inclusión Educativa UBB 2014.
En la actividad, organizada por el departamento de arte y cultura de la Dirección de Desarrollo Estudiantil de la UBB en Concepción, participó la Agrupación de Inclusión Educativa UBB.
“Para nosotros es sensible el día, pues trabajamos con un departamento de arte y cultura y de bienestar estudiantil y ambos tienen sintonía con esta actividad, porque el relato que el autor tiene es pertinente con lo que nosotros queremos lograr como universidad que es ser un espacio educativo inclusivo”, advirtió el director de Desarrollo Estudiantil, Fernando Morales, quien agregó que “la universidad apostó por una admisión especial, creando una beca de apoyo a estudiantes con discapacidad el año pasado y estamos en camino de poder establecer una política al respecto de modo que no sean acciones aisladas desde distintos departamentos, sino una realidad institucional”.
La obra literaria publicado el año 2013, relata tres historias reales de personas con discapacidad. Una de ellas corresponde a la experiencia de Ricardo, un joven no vidente de 19 años, cuya historia comienza con la maratón organizada el año 1980 por la Dirección General de Deportes. Eran más de dos mil participantes de distintas instituciones, familias y corredores adultos y niños, que recorrieron unos seis kilómetros por las principales calles de Concepción. Entre ellos Ricardo que, apoyado en el brazo de Pedro Cortés, fue el primero en llegar a la meta entre los vítores y aplausos del público que seguía la carrera.
“El libro está Inspirado en mi trabajo en Coalivi a través de historias que ejemplifican lo que es la discapacidad visual desde el momento en que se adquiere, con todos sus problemas sociales laborales, familiares y todo lo que implique. Un niño que nace ciego, joven empresario egresado de esta universidad, empresario que un accidente lo dejó en condiciones de ceguera total y una persona de tercera edad, poniendo en evidencia que todas las personas pasan por estos mismo procesos”, explicó Pedro Cortés.
En la UBB, hay 36 estudiantes con capacidades diferentes que ingresaron rindiendo la PSU y según los académicos y jefes de carrera, han tenido un buen avance en sus estudios.