La Sala Schäfer del Centro de Extensión de la sede Chillán cobijó la ceremonia de graduación de Postgrados de la Facultad de Educación y Humanidades. En la oportunidad, alrededor de 40 profesionales recibieron la respectiva medalla y diploma que acredita el nuevo grado académico obtenido.
Dicha entrega fue guiada por el decano de la Facultad de Educación y Humanidades, Marco Aurelio Reyes, y por los respectivos directores de los programas: Pedro Sandoval Rubilar del Magíster en Educación; Fancy Castro Rubilar del Magíster en Liderazgo y Gestión de Establecimientos Educacionales; Francisco Cisterna Cabrera del Magíster en Pedagogía para la Educación Superior; Tilma Cornejo Fontecilla del Magíster en Didáctica de la Lengua Materna; Mauricio Rojas Gómez (s) del Magíster en Enseñanza de las Ciencias Sociales; Nelson García Araneda (s) del Magíster en Familia; y Mauricio Rojas Gómez del Magíster en Historia de Occidente.
En la ocasión, el Decano de la Facultad de Educación y Humanidades recordó el significado de la Educación en palabras de Nelson Mandela, quien la definió como ‘el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo’. Igualmente, tomó palabras del personaje Mafalda, quien aseveraba que ‘de tanto ahorrar en Educación nos hemos hecho millonarios de ignorancia’. Ambas frases, dijo el decano, nos cuestionan y se entroncan con otros conceptos que hoy apremian e interpelan a los maestros: calidad y excelencia en Educación.
Al respecto, precisó que dos temáticas actuales agravan la esencia de la profesión: “Las expectativas aspiracionales de una sociedad crítica emergente, y la jungla de los lenguajes de la educación que algunos pensadores de la educación califican como ‘infectados’, que recibimos como doctrina que no podemos obviar ni descuidar so pena de quedar marginados de este verdadero tsunami de la crisis educacional”.
Por ello, llamó a los nuevos graduados a “no clavar en los muros de nuestro hogar o en nuestra escuela el grado académico que hoy obtienen como simple ornamento. Más bien, deben convertirse en transformadores sociales, más humanistas y menos oscuros para que nuestras escuelas se sustenten en los saberes pedagógicos de cada uno de ustedes y no en el espacio donde se cumplen y acatan normas desde afuera”, valoró.
A su vez, la secretaria ejecutiva de la Dirección de Postgrado, Marianela Moraga Negrete, destacó que resulta un orgullo para la Universidad, el ver partir a una nueva generación de graduados, quienes han sido formados bajo el sello de la UBB, lo que da cuenta de compromiso con la excelencia, responsabilidad y calidad en la formación de capital humano avanzado.
“Seguramente hay muchos recuerdos de estos años; mucho esfuerzo, sacrificio, dedicación en su formación, pero sin duda está la satisfacción de haber llegado a la meta, de lograr el objetivo, de alcanzar el sueño seguramente… de la estabilidad que da el sentir que se ha cumplido”, resaltó.
La jornada fue amenizada musicalmente por el trío Fermata integrado por Angely Avilez Mora como primer violín; Ashley Miranda Hayashi como segundo violín, y por Camilo Parra Urbina en el violonchelo.
La ceremonia de graduación culminó con el himno “Gaudeamus Igitur”, tradicional canción universitaria.
