Encuentro congregó a estudiantes de las sedes de Chillán y Concepción, quienes asistieron a la conferencia del decano de la Facultad de Ciencias, Dr. Mauricio Cataldo Monsalves, referida a “La Física de la película Interestelar”, y a la conferencia “Buscando genes en la Patagonia”, del Dr. Juan Carlos Marín, jefe del Laboratorio en Genómica y Biodiversidad de la UBB.
El Campus Fernando May congregó el Encuentro de Bachillerato 2015, que convoca a estudiantes de las versiones del Programa de las sedes de Chillán y Concepción. Dicha actividad se da en el marco del aniversario número 20 del Programa, que se ha consolidado durante esta etapa, según explicó el director de Bachillerato en Ciencias de la sede Chillán, académico Ivo Basso Basso.
“El Programa se ha ido consolidando y las carreras de la UBB ofrecen 5 cupos para estudiantes provenientes del Programa de Bachillerato en Ciencias. Hemos realizado una Renovación Curricular, una malla nueva de acuerdo al modelo curricular basado en competencias, lo que también es una fortaleza. Los objetivos del Programa de Bachillerato son mejorar la formación en Ciencias Básicas, para quien así lo estime, y también aportar a la definición de intereses vocacionales, porque muchos estudiantes cuando salen de cuarto medio, no siempre tienen claro qué quieren estudiar. En ese contexto, el Programa de Bachillerato les proporciona la oportunidad de descubrir sus intereses, conocer la Universidad, adquirir hábitos y técnicas de estudio, insertarse en la Universidad y definir una vocación, o también consolidar la formación en Ciencias Básicas”, valoró el académico.
“La Física de la película Interestelar”
En la ocasión, el decano de la Facultad de Ciencias, Dr. Mauricio Cataldo Monsalves, brindó la conferencia “La Física de la película Interestelar”, que forma parte del ciclo de conferencias conmemorativas de los “100 años de la Teoría General de la Relatividad” formulada por Albert Einstein.
El Dr. Mauricio Cataldo destacó el trabajo conjunto realizado por el científico Kip Thorne, y por el director de cine británico Christopher Nolan en la película “Interestelar”, donde por primera vez se logra visualizar correctamente los conocidos “agujeros de gusano” y “agujeros negros”, de acuerdo a lo señalado por la Ciencia, específicamente a través de la Teoría General de la Relatividad de Einstein, que describe la física de estos objetos cósmicos.
“Esta película tiene valor desde el punto de vista científico, ya que es la primera vez que en el cine se muestra cómo debería ser realmente el encontrarse con un ‘agujero de gusano’ y usarlo como puente para viajar desde la Vía Láctea a otra galaxia. El motivo por el cual Thorne aceptó colaborar con Nolan fue que esta interacción entre ciencia y cine sería por un lado una oportunidad para traer los ‘agujeros de gusano’ y los ‘agujeros negros’ según la Relatividad General a Hollywood, y por otro, una oportunidad para crear simulaciones de ‘agujeros de gusano’ y ‘agujeros negros’ para la investigación en Relatividad General y la Astrofísica”, aseveró el Dr. Mauricio Cataldo.
Según expresó el Decano de la Facultad de Ciencias, antes de comenzar el trabajo conjunto con Nolan, Thorne estableció dos reglas: nada violaría las leyes físicas conocidas hasta ahora y que cualquier especulación del guion surgiría a partir de la ciencia y no de la mente creativa de un guionista.
El Dr. en Ciencias Físicas, Mauricio Cataldo, precisó que estos conceptos suelen ser difíciles de comprender en principio, porque se rompe con la noción tradicional de Espacio y Tiempo como realidades separadas. “Son complejos porque rompen con la idea que tenemos a través de la vida cotidiana, de lo que es Espacio y Tiempo. De hecho, cuando se crea la teoría General de la Relatividad, hubo mucha controversia porque rompía todos los esquemas que se tenía en ese entonces sobre el Espacio y el Tiempo concebidos en forma separada, y la teoría de la Relatividad muestra que en realidad Espacio y Tiempo forman un continuo, un solo ente y siempre van juntos, lo que se conoce como espacio-tiempo. Nosotros no nos damos cuenta de aquello y percibimos el Espacio y el Tiempo como cosas separadas”, describió el investigador.
“Lo más destacable de la teoría General de la Relatividad es que nace del intelecto humano, porque Albert Einstein la formula sin realizar ningún experimento en la práctica. Él solo realiza experimentos ideales, pensados, hace uso de las matemáticas y de una lógica férrea y es capaz de llegar a estas ecuaciones que hasta el día de hoy se emplean y que incluso, gracias a ellas podemos usar el GPS”, valoró el decano.
“Buscando genes en la Patagonia”
Por su parte, el Dr. Juan Carlos Marín, jefe del Laboratorio en Genómica y Biodiversidad de la UBB compartió con los estudiantes su experiencia como investigador y científico, canalizado a través del campo de la Genética de la Conservación. Dicho interés, así como la excelencia del trabajo realizado, le ha llevado a convertirse en referente internacional en genómica de camélidos sudamericanos y en huemules.
“Se trataba de jóvenes de primer año, de manera que me interesaba comunicarles que si encuentran el camino de aquello que más les gusta y apasiona, deben seguir adelante. Les comenté que mi tutor me decía que no trabajara con animales mamíferos grandes porque es más difícil, pero les indiqué que yo era porfiado y me interesaba esa área así es que seguí adelante, y hoy tengo miles de muestras pese a lo complejo que podía parecer en principio. Si uno quiere hacer algo, lo puede lograr”, manifestó el investigador.
Igualmente, el Dr. Juan Carlos Marín hizo hincapié en que cualquiera sea el camino a seguir, lo fundamental es la formación y el estudio concienzudo, de manera que los jóvenes deben apostar por el trabajo sistemático y disciplinado.
“El mensaje más técnico respecto del aporte que uno hace a la sociedad desde la Genética de la Conservación se vincula con el afán de conocer genéticamente las especies para ayudar a su conservación, y una vez que las conocemos genéticamente, recién podemos aplicar dichos conocimientos en alguna acción o estrategia de conservación. Les comentaba, a modo de ejemplo, que tras estudiar los Guanacos a nivel de Sudamérica, apareció una oportunidad de participar en un juicio por caza ilegal de fauna protegida. En el sur del país carabineros descubrió a un grupo de personas que habían faenado un Guanaco, pero en principio no sabían de cuántos animales se trataba, y además, las personas sorprendidas alegaban que se trataba de carne de caballo. Gracias a la formación en el área, pudimos definir que se trataba de un solo guanaco de la zona, a pesar que los carabineros pensaban que eran tres, y que el animal era hembra. Por esa trabajo hubo sanción para esas personas”, valoró el Dr. Juan Carlos Marín.
El jefe del Laboratorio en Genómica y Biodiversidad de la UBB, también destacó que es importante que las nuevas generaciones conozcan que en la fauna chilena hay especies icónicas que lamentablemente no se conocen debido a su menguado número por la acción del hombre.
“Como ejemplo compartimos el caso del huemul, y como no es conocido, muchas veces es confundido con otros animales como el pudú, según pudimos ver en una video donde un equipo de prensa, se encuentra con un huemul durante una grabación nocturna y lo confunde con un pudú. Ahí me di cuenta que muy pocos han visto un huemul y sería muy bueno que todos nosotros alguna vez lo vea, y ¿cómo lo podremos ver? Bueno, ayudando a conservarlo, conociendo más de la especie a través de su genética”, ilustró el Dr. Juan Carlos Marín.
El Encuentro de Bachillerato 2015 también consideró un almuerzo de camaradería, actividades deportivas y reuniones de trabajo.