La actividad formó parte del programa aniversario de la Escuela de Psicología, y contempló la clase magistral del Profesor Emérito José Luis Ysern de Arce, junto a la experiencia del Programa de Reparación y Atención Integral de Salud (PRAIS), del Centro Psicosocial UBB, así como del Colectivo de Estudiantes de Psicología, agrupaciones que asumen la perspectiva de la Psicología de la Liberación.
“Homenaje a Ignacio Martín-Baró” se denominó la clase magistral brindada por el Profesor Emérito de la UBB, José Luis Ysern de Arce, durante la Primera Jornada de Psicología de la Liberación convocada por la Escuela de Psicología de la UBB.
La académica coordinadora de la Jornada, Dra. Soledad Martínez Labrín, comentó que se pretendía homenajear la figura de Ignacio Martín-Baró, psicólogo de la Liberación, en una fecha cercana a un nuevo aniversario de su muerte, ocurrida el 16 de noviembre de 1989 en El Salvador, donde fue asesinado.
“Nuestra Escuela igualmente tiene un sello psicosocial inspirado en este tipo de teorías más latinoamericanistas, y queremos darle esa impronta. Por eso es que desde su fundación, el primer director de la Escuela, José Luis Ysern de Arce, le ha dado esta connotación de liberación al trabajo que hacemos, que no es un trabajo sencillamente técnico, sino que tiene que ver con el compromiso social. La idea de invitar a José Luis Ysern apunta a brindar el marco teórico respecto de qué es la Psicología de la Liberación y cómo hacerla. Las experiencias que comparten el PRAIS y el Centro Psicosocial UBB nos interesan porque ahí se trabaja desde la óptica de la Psicología de la Liberación, y queremos ver cómo eso se aterriza en intervenciones concretas con personas, cómo dicho centro se posiciona desde esta teoría”, ilustró la investigadora.
La Dra. Soledad Martínez precisó que la instalación del enfoque de la Psicología de la Liberación en la Escuela de Psicología UBB es un proceso en construcción, favorecido por los afanes del académico José Luis Ysern desde el origen de la carrera.
Homenaje
Durante la clase magistral, el académico José Luis Ysern de Arce evocó la figura del psicólogo nacido en Valladolid en 1942, quien abogaba por cambios en las sociedades oprimidas y asumía la labor del psicólogo como agente de cambio social.
Según expresó el académico Ysern de Arce, los principios básicos que orientan el juicio ético de quienes adscriben a la Psicología de la Liberación consideran que: “La persona humana con su dignidad está en el centro de nuestras preocupaciones. No cabe discriminación alguna por motivo alguno. La Psicología de la Liberación se siente motivada ante todo y sobre todo por el desarrollo humano integral y el respeto a los Derechos Humanos. La Psicología de la Liberación busca el bien común de la sociedad y pone la solidaridad dentro de las actitudes fundamentales en la ética del psicólogo. La educación gratuita y de calidad, al igual que la salud pública gratuita y de calidad, es un derecho para todos. Nuestra prioridad está en los más pobres y desfavorecidos de la sociedad. Son ellos quienes constituyen la mayoría popular en nuestra población latinoamericana”, aseveró.
“Pretendemos una Psicología que sea conocimiento y acción, estudio intelectual y trabajo práctico; una Psicología integral construida a base de ortodoxia y ortopraxis, términos muy apreciados por Martín Baró”.
“Nuestra Psicología de la Liberación es una reflexión activa y una acción reflexionada. Una ciencia construida a través del conocimiento compartido desde distintas fuentes: la academia y el pueblo de a pie. La ciencia psicológica convence más cuando se construye en proceso participativo a partir de la colaboración de distintos saberes: el académico y el de las comunidades populares de base”.
“Ignacio nos mostró con su propia vida una gran convicción: la sabiduría popular existe y es muy sabia. Por eso nos interesa apoyar desde la Universidad la dinámica de los sectores populares. La buena Universidad es humilde, no es acaparadora del conocimiento porque es muy consciente de que hay muchos tipos de conocimiento más allá de los académicos. Respeta esos conocimientos extraacadémicos y les pide colaboración”.
“La Universidad debe ser un centro de buena investigación. Llamamos buena investigación aquella que busca y profundiza todo lo que tenga que ver con el bien común de la sociedad, del país, de la región. ¿Qué diría Martín Baró de algunas de las investigaciones realizadas actualmente en alguna Universidad? ¿Tienen mucho que ver dichas investigaciones con el interés de la sociedad en la que está inserta la Universidad? ¿En sus métodos y objetivos, tienen como preocupación central la dimensión social y comunitaria?”.
“Para Ignacio la Psicología de la Liberación busca la transformación social y busca la forma de crear conocimiento desde los oprimidos. Nuestras Universidades Regionales son para eso; la existencia de ellas se justifica si responden, mediante sus planes de docencia, investigación y extensión, al bienestar integral de los ciudadanos de su región”.
“Soñamos con una Universidad que sea centro de planificación para pensar el futuro y adelantarse a los acontecimientos (como hacen muchos de los estudiosos de la ecología). Nuestro mundo es cambiante y dinámico; la Universidad también tiene que ser dinámica para responder a los tiempos y espacios en que vive, y si es posible, adelantarse a esos tiempos”.
“No olvidamos que para ti la liberación social y la liberación personal van de la mano. Afirmaste que la patología de las personas no se agota en el plano individual; que no es ajena a la historia de los pueblos y a la situación social. Si nuestros hombres y mujeres han aprendido actitudes de sumisión a partir de la realidad de injusticia social, ahora contigo, tendrán que desaprender esa actitud y aprender la de la liberación. Tú nos has enseñado que esto requiere de una nueva epistemología, de una nueva forma de buscar el conocimiento”.
“Desde esta joven Escuela de Psicología de la Universidad del Bío-Bío, caracterizada por su sello social comunitario, queremos reafirmar nuestro compromiso de ser fieles, cada día más fieles, a los principios de la Psicología de la Liberación. Si la verdad nos hace libres, esa verdad liberadora para los pueblos y pobladores latinoamericanos tendremos que construirla, y nosotros queremos ser sus constructores. Ayúdanos tú”, concluyó el académico José Luis Ysern de Arce.
