«Conflictos socioespaciales y participación ciudadana en Chile», se tituló la charla que dictó el Dr. Gonzalo Delamarca, sociólogo de la Pontificia Universidad Católica de Chile, en el marco del inicio del año académico de la Escuela de Trabajo Social de la sede Concepción realizada en el auditorio Hermann Gamm.
El discurso de bienvenida estuvo a cargo del director de Escuela, Héctor Vargas, quien manifestó que “la reflexión es parte permanente de nuestro proceso como profesionales, por tanto lo que estamos haciendo hoy al dar inicio a este año académico con este importante expositor, es dar una señalar sobre aquello que es importante para nosotros como Escuela”.
En tanto el Dr. Gonzalo De la Maza agradeció la invitación y explicó que la charla se desprende de su participación el año pasado en el Consejo Nacional de Participación Ciudadana y Fortalecimiento de la Sociedad Civil, instancia convocada por la presidenta Michelle Bachelet, “el tema de la participación ciudadana para los trabajadores sociales es crucial, pues la manera en que los ciudadanos se involucran en las decisiones de la acción pública es un punto fundamental y no está resuelto, pero es clave para el desarrollo de la sociedad. Ha tenido un avance muy pequeño a pesar que ha pasado muchos momentos, pero desde el 2007 en adelante se empiezan a ver avances, el desafío es perfeccionar aquello”, expresó.
El experto, comentó que la participación ha formado parte del discurso político desde el año 1990, pero ha estado subordinada y no se ha traducido en iniciativas prácticas de envergadura, porque el consenso dominante ha excluido esto, sólo manteniéndolo como instancias consultivas e instrumentales. Entonces sólo se ha traducido en participación instrumental, es decir sólo para mejorar la toma de decisiones de los responsables y no para fortalecer a la ciudadanía restringida y fragmentada. Hoy si el sistema político no se reforma es difícil que la participación tenga un buen espacio.
Precisó además que en la década de los 90 era una demanda más bien latente, pero de mediados del año 2000 en adelante y con fuerza el año 2011 es que la demanda de participación está presente. En los encuentro locales auto convocados del 2016, la primera institución privilegiada por los encuentros son las instituciones participativas. En definitiva la demanda está, pero la respuesta es débil, por tanto la fragmentación permanece.