Contribuir a la gestión productiva de los pequeños agricultores del país mediante la implementación de sensores que permiten medir las variables ambientales de temperatura y humedad al interior de un invernadero en un sistema 3D, es la investigación que está realizando la UBB como entidad ejecutora a través de los académicos de los departamentos de Física y de Matemática de la Facultad de Ciencias, Dr. Luis Soto Mardones y Mg. Ricardo Pavez Fuentes, respectivamente.
La iniciativa se lleva a cabo en el marco del proyecto denominado “Desarrollo de un sistema de optimización de la gestión productiva para los pequeños agricultores con cultivos bajo condiciones de invernadero, mediante utilización de las TICs, (17BPE-73756)”, proyecto que es liderado por el Instituto de Investigaciones Agropecuaria, INIA-Quilamapu, con la co-ejecución de las universidades Adventista de Chile, de Chile y Universidad del Bío-Bío, con financiamiento de Corfo.
Para ello se construirá un sistema electrónico que permita monitorear, controlar, colectar, procesar y generar informes en tiempo real respecto del comportamiento de cada uno de los invernaderos de los pequeños agricultores que se conecten al sistema, mediante la integración de sensores de monitoreo, automatización, y registro de condiciones medioambientales que se procesan y transforman en reportes a extensionistas y agricultores para optimizar el manejo y la productividad de los invernaderos.
Los académicos explicaron que a través de sensores se busca controlar el sistema ambiental para que la producción sea óptima, esto debido a que las plantas pueden soportar una temperatura determinada, la que al ser superada genera una alerta directa al pequeño agricultor para que realice acciones que ayuden al cambio de temperatura.
Para obtener información en sistema 3D, los académicos de la UBB instalaron 27 sensores en los invernaderos experimentales, los que dieron a conocer cómo se distribuye la temperatura y la humedad. “Los resultados son muy relevantes, porque este sistema demuestra que la temperatura tiene una distribución muy irregular. Se observó variaciones entre la altura de las plantas (~25 cm) y el techo (250 cm) una diferencia superior a los 9°C al medio día (ver figura), lo que demuestra que la temperatura al interior de los invernaderos es muy compleja y requiere muchos más estudios”, detalló el Dr. Luis Soto Mardones.
El proyecto que ya se encuentra en su etapa final continuará con pruebas experimentales en tres modelos de invernaderos diferentes para evaluar cómo se comportan las variables medioambientales.
Los resultados finales serán dados a conocer a mediados del próximo año en publicaciones científicas y se espera que pueda ser implementados para pequeños agricultores en diversas regiones del país, programando lo sensores de acuerdo al territorio.