La académica del Departamento de Nutrición y Salud Pública, Mg. Alejandra Rodríguez Fernández, expuso la ponencia “Determinantes sociales en el desarrollo de la pandemia COVID-19”, en el marco del II Seminario Birregional Cultura, Alimentación y Salud Pública, convocado por el Departamento de Nutrición y Salud Pública de la Universidad del Bío-Bío y el Departamento de Salud Pública de la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC).
La académica Mg. Alejandra Rodríguez Fernández, precisó que el objetivo de la presentación consistió en realizar un análisis basado en la evidencia respecto de cómo las condiciones de vida o determinantes sociales influyen en el desarrollo de la pandemia por Covid-19.
“Si observamos la situación actual, el panorama pudiese no parecer muy alentador, sobre todo para nosotros (Chile), que exhibimos indicadores de contagio que están entre los más altos a nivel mundial. En ese sentido, es importante preguntarse por qué el Covid-19 a diferencia de otros coronavirus, alcanzó estos niveles pandémicos. Esa respuesta tiene relación con cómo se mide el desarrollo de los patógenos. Al respecto debemos precisar que el desarrollo de las enfermedades se mide en dos escalas; la tasa de letalidad y de contagio”, ilustró.
Si bien, la pandemia registra sólo algunos meses de desarrollo y consideramos la información disponible hasta ahora y su comportamiento, podría ser comparada con la Gripe Española de 1918, aun cuando ésta última la letalidad alcanzó al 1% de la población en su momento, señaló Rodríguez Fernández.
La académica UBB aseveró que ante la consulta sobre cuáles han sido los factores más influyentes en el desarrollo de la pandemia, la respuesta viene dada por los Determinantes Sociales, condiciones en que se desarrolla la vida de las personas. “Encontramos determinantes biológicos como la edad, sexo, factores físicos y genéticos intrínsecos del individuo que no son modificables. Por otro lado, están las condiciones socioeconómicas, culturales y medioambientales”, señaló.
En esta línea, el modo en que las personas hacen frente a la pandemia dependerá directamente de las condiciones de vida y de trabajo, como el acceso a los servicios de atención de salud, nivel educacional, vivienda, calidad de la alimentación, estilos de vida, redes de apoyo, entre otros factores.
“Si tuviéramos que hacernos una pregunta en términos de cuál es la meta de nuestra sociedad para enfrentar esta crisis, claramente se vincula con la necesidad de mitigar el impacto de la pandemia asociado a los factores físicos, sociales y psicológicos. En ese sentido, si los indicadores de los determinantes sociales de un individuo son mejores, mayor es la probabilidad de hacer frente de una manera más adecuada a los estragos de la pandemia”, reseñó la investigadora.
La académica Alejandra Rodríguez comentó que en atención a las diferencias que se constatan en los Determinantes Sociales de distintos grupos poblacionales, es factible sostener que el Covid-19 es un virus desigual. “Si analizamos y observamos cómo es su distribución en términos de su contagio y de su impacto, claramente lo encontramos más desarrollado en poblaciones con sus determinantes sociales más deprimidos”, argumentó.
