La Escuela de Contador Público y Auditor de la Facultad de Ciencias Empresariales de nuestra casa de estudios realizó el octavo seminario La ética y lo profesional, que este año abordó el tema Lo bueno para uno y lo malo para el otro. Transición hacia una sociedad más transparente y honesta, en el auditorio de Ingeniería en Maderas.
La actividad contó con la bienvenida del decano (s) de la Facultad de Ciencias Empresariales, Manuel Crisosto y con las palabras introductorias del coordinador del seminario, académico Marcelo Navarrete, quien relevó la importancia sobre el tema en una sociedad que presenta “síntomas de enfermedad crónica”, que no ha sido tratada con el debido cuidado. “Lo malo sería no reconocer que nos falta honestidad y transparencia en nuestras relaciones y decidir seguir padeciendo esta enfermedad crónica, lo bueno sería reflexionar razonar y reconocer que estamos con falta de honestidad y que de nosotros depende si queremos hacerle frente a esta enfermedad y empezar a recuperarnos, aceptando el medicamento principal que es la verdad. Los cambios pasan por nosotros mismos, si hablamos con la verdad entramos al camino de la transparencia y honestidad y ahí podemos hacer cambios significativos en la sociedad”, aseveró.
La académica de la Pontificia Universidad Católica de Chile y doctora en filosofía con mención en ética, Pamela Chávez, abrió las exposiciones con el tema Lo tuyo, lo mío y lo nuestro. Reeducar el sentido del vínculo de la ciudadanía responsable”, explicando que la reflexión ética contemporánea tiene que ser multidisciplinaria, pero también desde dentro de las actividades humanas, debido a que nadie mejor que el contador o la contadora saben cuáles son los problemas éticos que se van suscitando al interior de su profesión y, por lo tanto, ese saber tiene que dialogar con el saber ético filosófico.
Al respecto precisó que todos tenemos cierta experiencia en ética, sabemos y nos convocan cuestiones que nos preocupan como la deshonestidad, la no transparencia, la inequidad, la discriminación, la mentira, la falsedad, el engaño, la trampa, el robo, la violencia. “¿No será que estamos en una especie de crisis moral de la sociedad? Probablemente sí, y desde mi reflexión para poder entenderla tenemos que ir a la base de lo que es la experiencia moral, que tiene que ver con el vínculo, de sentirme ligado a otro, estando obligado a tener deberes, compromisos y responsabilidades”, señaló.
Entonces, enfatizó, la crisis está en el vínculo de las relaciones intersubjetivas, es decir, entre los sujetos que interactuamos y nos comunicamos en el mundo. Lo mío, lo tuyo y lo nuestro es el tema fundamental de la crisis moral, hay que hacer un esfuerzo por volver a educar el sentido de vínculo entre los sujetos y de ciudadanía responsable.
Por su parte, el socio de la firma EY Chile, Francisco Avendaño, dio a conocer su experiencia con respecto a la ética profesional, que al ser vulnerada ha implicado la caída de empresas importantes a nivel mundial. En su exposición presentó casos de la ética profesional en el ejercicio de la profesión, la responsabilidad de quien maneja información, de quien audita y lo fundamental de que la ética guíe a la industria, para que las cosas ocurran con la disciplina que tienen que ocurrir. “De ahí nacen todos los valores de la compañía, lo que se refleja en una cultura de alto desempeño. Entre ellos destaco la integridad, respeto, trabajo en equipo, con personas que construyen relaciones basadas en hacer lo correcto”.