La edición del Termómetro Laboral de noviembre presentaron los observatorios laborales del Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence) y que están a cargo de la Facultad de Ciencias Empresariales de la Universidad del Bío-Bío, en las regiones de Ñuble y del Biobío.
Comunicaciones OLÑ y OLB
Mercado del trabajo de Ñuble muestras señales de recuperación
Un aumento de la tasa de ocupación en todos los niveles educativos, tramos de edad y una caída de los ocupados ausentes son señales que empiezan a mostrar los principales indicadores de la economía regional. Así lo constata la edición de noviembre del Termómetro Laboral elaborado por el Observatorio Laboral de Ñuble de SENCE-UBB y que monitorea mensualmente el mercado del trabajo de la región.
“La actividad del segundo semestre se explica por la capacidad de adaptación de las empresas, el proceso de vacunación contra el Covid-19 y el avance en el Plan Paso a Paso”, precisó Bernardo Vásquez, director del observatorio que ejecuta la Universidad del Bío-Bío.
Para el seremi (s) de Trabajo y Previsión Social, Edmundo Novoa, estas señales están en sintonía con las últimas cifras del Índice Mensual de Actividad Económica (IMACEC) y se reflejarían en parte por la recuperación de la economía y la mayor demanda de trabajadores.
“Esta recuperación del empleo ha sido heterogénea en términos del aumento sustancial de la tasa de ocupación informal y el aumento de los trabajos por cuenta propia. Asimismo, la participación femenina que ha sido la más dañada durante la pandemia, en los últimos trimestres ha presentado signos de recuperación que se reflejan en la tasa de ocupación y desocupación. Por ello, resulta fundamental que la fuerza laboral de la región utilice los instrumentos de incentivo al trabajo que aún están disponibles a través del plan Subsidio al Empleo, cuyo principal objetivo es permitir el ingreso a fuentes laborales formales y, además, complementos remuneracionales en dichos puestos”, comentó.
Sin embargo, de acuerdo al boletín, la tasa de informalidad laboral de Ñuble presenta una tendencia al alza de 5 puntos porcentuales superior al país desde mediados del 2020 con una leve caída en los últimos meses.
De acuerdo al Termómetro Laboral de noviembre desde enero hasta septiembre del presente año han postulado casi 29 mil personas en Ñuble al subsidio Contrata y Regresa, mientras que a 10.280 personas se ha entregado el Bono al trabajo de la Mujer y a 4.660 el Subsidio al Empleo Joven.
Observatorio Laboral Biobío
De acuerdo al Termómetro Laboral de noviembre, la tasa de ocupación regional del trimestre julio – septiembre del 2021 fue de 47,2% (640.118 personas ocupadas), y aumentó 8,0% respecto al mismo período del año anterior, equivalente a 47.287 personas más. “La tasa de ocupación sigue en ascenso, aumentando de un 42,2% en el trimestre abril-junio de 2020, a un 47,2% este último trimestre de julio-septiembre, aunque aún por debajo del 52,8% que había antes de la pandemia. Si lo vemos por sexo, las mujeres continúan con una tasa de ocupación que no supera el 40%. Esta es una situación casi crónica si la comparamos con las tasas de ocupación femenina en países de la OCDE, donde bordean el 70%”, menciona Luis Méndez Briones, coordinador del Observatorio Laboral del Sence de la Región del Biobío.
“La baja participación de las mujeres, en la región y en el país, se debe a que por una condición social y de género se les ha asignado preferentemente el cuidado del hogar, la familia y los hijos, sin que en estas funciones reciban ayudas importantes por parte de la sociedad y del Estado. No reciben un sueldo, no tienen ayudas de organismos sociales, guarderías infantiles, asistencia, ni apoyo para el cuidado de adultos mayores, etc. Esto afecta mayoritariamente a las mujeres con menor nivel educacional”, comenta Luis Méndez, académico de la Universidad del Bío-Bío.
Según resultados del Termómetro Laboral de noviembre, las personas con educación superior técnica completa o profesional completa, presentan tasas de participación de entre 70% y 76%. Mientras que las personas con educación básica o media, presentan tasas de 32% o 53% en la región.
“Para desempeñarse laboralmente, las personas requieren cultivar en sí mismas un «acervo» de capital humano compuesto por ciertas actitudes, valores, destrezas y conocimientos. Los primeros se forman en la familia y en la sociedad, la destreza y los conocimientos a través de la educación formal. Si las personas poseen bajo nivel educacional tendrán bajas posibilidades de encontrar empleo, especialmente hoy, cuando las ocupaciones privilegian el uso del conocimiento y la información”, explica Luis Méndez, Coordinador del Observatorio Laboral del Sence de la Región del Biobío.
