En Paraninfo UBB se estrenó Willow de Penco, un documental de Marcelo Gotelli, en tanto en Casa Gonzalo Rojas de Chillán se proyectó Lemebel: Una revolución Marica, de Joanna Reposi.
Por Miguel Lagos.
Con todos los desafíos que implica volver a proyectar en un espacio público, el Cineclub UBB abrió su temporada cinematográfica por partida doble; arrancó el 19 de mayo con Willow de Penco, un documental realizado por Marcelo Gotelli, que fue presentado por Erik Vásquez, Director del Centro Cultural y Cinematográfico de Penco; La proyección formó parte de las actividades de estreno del filme en Concepción (días antes se dio, el 11 de mayo, en la Biblioteca Municipal de dicha ciudad), generando diálogo sobre el valor patrimonial del territorio, la expansión de la loza de Penco y su colección, la historia local y tradición industrial del Gran Concepción y la figura del autor del Willow, Roberto Benavente.
En tanto en Casa Gonzalo Rojas, el Cineclub de nuestra casa de estudios, después de casi 3 años sin proyectar cine en Chillán, exhibió «Lemebel: Una Revolución Marica (2019)»; en la ocasión se estableció además un diálogo telemático con su realizadora, Joanna Reposi. La actividad contó con un lleno total para el lugar salvaguardando los protocolos por Covid-19. La película es un retrato de cuerpo entero de Pedro Lemebel, figura del arte nacional que se hizo ampliamente conocida por sus novelas y ensayos, pero que inicia su carrera artística desde la performance con Francisco Casas a fines de los ochenta, cuando fundan el colectivo “Las Yeguas del Apocalipsis”. La conversación con Joanna Reposi en tanto se realizó una vez concluida la proyección, en donde se destacó el trabajo investigativo de ocho años para realizar el documental.
La actividad tuvo lugar el jueves 26 de mayo y fue financiada por el Fondo de Actividades de Interés Nacional del Ministerio de Educación.
Leonardo Seguel Briones, Director de Extensión UBB, destacó el trabajo de vinculación con el medio realizado por los encargados de los cineclubes (Carlos Yévenes en Concepción y Miguel Lagos en Chillán) quienes se asociaron con instituciones culturales pertenecientes a territorios específicos, “generando trabajos colaborativos que benefician a las comunidades de ambas regiones”, señaló el facultativo.