El martes 2 de mayo se conformó en Chillán la mesa de trabajo para la participación ciudadana en el proceso constitucional, integrada por representantes estamentales y de las seis facultades de nuestra Universidad. La instancia impulsada por la Rectoría y coordinada por el académico Dr. Javier León Aravena, tiene como objetivo difundir y promover la participación de la comunidad universitaria y externa en la discusión del anteproyecto de Constitución que emane de la Comisión de Expertos/as, junto con recoger ideas y propuestas.
La Universidad del Bío-Bío debe colaborar con un proceso tan relevante como es la elaboración de una nueva Constitución. Es parte de nuestra responsabilidad social y nuestra obligación como institución de educación superior estatal y pública, manifestó el rector Dr. Benito Umaña Hermosilla. Por ello, hemos convocado a un comité triestamental para abordar esta temática y ponernos a disposición de nuestras regiones y el país, agregó.
La ley 21.533 que establece el procedimiento para la elaboración y aprobación de una nueva Constitución estableció la instalación de la Secretaría de Participación Ciudadana, coordinada por la Universidad de Chile y la Pontificia Universidad Católica de Chile, con el objetivo de desarrollar las herramientas para que las personas se involucren en el proceso. Las vías de participación previstas son cuatro -iniciativas populares de norma, audiencias públicas, diálogos deliberativos y consultas ciudadanas- y se implementarán del 7 de junio al 7 de julio próximo, tras la instalación del Consejo Constituyente y la entrega del anteproyecto de Constitución formulado por el Comité de Expertos/as. Durante mayo, se está desarrollando una etapa de formación ciudadana, educación cívica y difusión del proceso, marco en el cual se invitó a las universidades acreditadas de todo el país a sumarse a la iniciativa.
Javier León explicó que, acogiendo este llamado, nuestra institución se comprometió a poner a disposición sus instalaciones para la realización de audiencias públicas, las que se llevarán a cabo durante tres días y permitirán que las personas u organizaciones presenten al Consejo Constituyente sus puntos de vista en relación a los temas que aborda el anteproyecto. Asimismo, la UBB deberá abrir sus espacios para el desarrollo de diálogos deliberativos, ya sea autoconvocados o con grupos representativos. En este último caso, la invitación es amplia, para proponer y realizar espacios de conversación que, previa metodología, serán también entregados como insumos al Consejo, señaló el Dr. León. Añadió que toda la información producida por los diversos mecanismos de participación será procesada por empresas especialistas y a través de plataformas digitales.
- El Dr. León precisó que la mesa de trabajo triestamental para la participación ciudadana tiene como propósito contribuir a la socialización del proceso constituyente e incentivar el involucramiento de las personas, tanto miembros de la comunidad universitaria como actores externos, en la discusión de las temáticas que contiene la propuesta de texto constitucional preparada por el Comité de Expertos/as, sobre la cual trabajará el Consejo Constituyente.
Como Universidad, nos interesa especialmente el rol formativo que podemos cumplir, afirmó Javier León. El académico adelantó que la UBB, a través de la Dirección General de Comunicación Estratégica, creará un sitio web con datos relevantes e información del proceso de elaboración constitucional, para que la ciudadanía pueda seguir las discusiones y conozca las decisiones que se están adoptando. Además, se invitará a la comunidad UBB a aportar contenidos en este sitio.
León planteó que frente a la desafección que puede haber en torno al proceso, las universidades pueden servir de puente para motivar, ordenar y encauzar la participación ciudadana y visibilizar la mirada desde regiones, colaborando a partir del conocimiento que se cultiva al interior de las instituciones. Es tiempo de razonar y reflexionar en torno a los caminos que la sociedad está tomando y, sobre todo, cuidar la democracia como sistema de convivencia y no sólo como método de toma de decisiones electorales, concluyó.