Una primera fracción de la obra del género de teatro documental “Memorias Colectivas de la UTE (Universidad Técnica del Estado), Sede Concepción” dirigida por Oscar Cifuentes, se presentó por primera vez, gracias a la gestión del colectivo “Memorias Colectivas del Biobío” (MCB), con el apoyo de la Escuela de Psicología de la Facultad de Educación y Ciencias sociales de la Universidad Andrés Bello.
Por Stephanie Moris.
El estreno de la pieza que se centra en las memorias de la UTE, actual UBB, y los estudiantes y profesores ejecutados y desaparecidos, fue expuesto el 23 de agosto en marco de las actividades de conmemoración en los 50 años del golpe cívico militar contra el Estado de Chile, bajo el proyecto “Memorias colectivas de la dictadura en la Universidad Técnica del Estado, sede Concepción y sus posibilidades de representación en el teatro documental”, financiado en una etapa por el Fondo de Creación Artística UBB, y en otra, por el Fondo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico, Fondecyt.
Luego del extracto de la obra, se realizó un conversatorio donde Oscar Cifuentes, el director teatral, especificó que “esta presentación sería un prólogo de la obra” dijo destacando lo especial de la pieza, ya que, al ser “actuada por estudiantes ya da una estética”, haciendo referencia a Scarlette Saray Lagos Novoa, Ing. Administración de Empresas de UNAB, Felipe Antonio Meza Soto de Dirección Audiovisual, UCSC, Valentina Isidora Palavecinos Ríos, Psicología, USS y Rocío Belén Valenzuela Soto, Arquitectura, UBB, quienes representaron a los protagonistas de la historia.
Según el grupo de actores estudiantes: “buscamos sensibilizar con quienes interpretamos para expresar mejor lo que íbamos a hablar”. “Es muy importante que se cuenten cosas que nunca se contaron y que se entiendan tan fácil al verla, me parece muy bonito”. “Fernando Moscoso -estudiante ejecutado- fue compañero de mi profesor de teatro y eso me motiva porque lo hace cercano y no como a quienes vemos siempre”, fueron parte de los comentarios que hicieron los intérpretes.
Por su parte, Juan Pablo Amaya, integrante de MCB, relató que para levantar la investigación precedente a la obra “hubo dificultades. Viajamos a Santiago y encontramos muy poco material. De testimonios hay harto olvido, que hizo difícil construir el relato. Documentos no digitalizados y mucho archivo en mal estado. Sin embargo, hubo hallazgos interesantes, como que “en Coronel se lanzó un cohete con combustible hecho ahí mismo, y vimos harta queja contra santiaguinos”, mencionó en tono cómico con risas de respuesta.
“En la vicaría se encuentra la carta de Fernando Moscoso antes de ser ejecutado, en ella indicó “que el pueblo no olvide este sacrificio”, por lo que se convierte en un personaje especial dentro de lo especial que son todos”. Agregó Guillermo Villagrán, también parte de MCB, sumado a Eduardo Solís, quién reflexionó sobre la vida de “jóvenes de 22 o 23 años. Que un gesto o una acción como dejar una flor o prender una vela, es hacer memoria”, rescató como sentido al traer los sucesos a la actualidad. “Nos interesan sus proyectos políticos, sus vidas para volver a humanizar. La vida es más importante que el cómo murieron”, agregó Paula Tesche acotando que “nos interesan sus proyectos políticos, sus vidas”.