El seminario taller “Validación Manual: Aprendiendo a hidratarme para crecer fuerte y sano”, convocado por el Grupo de Investigación Epidemiología Alimentaria Nutricional (EPIAN), del Departamento de Nutrición y Salud Pública, contó con la asistencia de nutricionistas de la Red del Servicio de Salud Ñuble, profesores y directivos de escuelas de la provincia de Ñuble, y permitió validar a través del juicio de expertos el material educativo desarrollado en el marco del proyecto FONIS EVS 13I 0016, que lidera la académica Dra. Jacqueline Araneda Flores.
El proyecto pretende investigar el efecto de un programa educativo basado en desincentivar el consumo de bebidas azucaradas promoviendo una hidratación saludable, y su impacto en el estado nutricional de escolares con sobrepeso y obesidad en las comunas de San Nicolás, Ñiquén, Chillán y Chillán Viejo.
El seminario taller, realizado en dependencias del Campus Fernando May, consideró la exposición del académico Dr. Patricio Oliva Moresco, en la presentación de los resultados de línea base del proyecto FONIS EVS 13I 0016, para luego continuar con la demostración del manual “Aprendiendo a hidratarme para crecer fuerte y sano”, realizada por la nutricionista Gladys Quezada Figueroa, actividad que finalmente dio paso al trabajo de validación del material educativo, proceso dirigido por la académica Luz Lobos Fernández, oportunidad en la que se constituyeron grupos de trabajo conformados por nutricionistas de la red pública de salud, profesores y directivos de las escuelas de la provincia de Ñuble que participan en el proyecto, según explicó la académica Gladys Quezada Figueroa.
-¿En qué consiste el manual “Aprendiendo a Hidratarme para Crecer Fuerte y Sano”?
-“Es un Manual educativo cuyo propósito principal es desincentivar el consumo de bebidas azucaradas en escolares de 9 a 12 años a través del desarrollo de diferentes sesiones educativas”.
-¿Cómo se estructura el manual?
-“El Manual posee dos grandes unidades “Bebidas azucaradas” y “El agua”, con un total de 15 sesiones educativas. Estas están diseñadas principalmente para que los escolares conozcan el concepto de bebidas azucaradas, el contenido de azúcar presente en ellas, y los daños al organismo que causa su consumo. La unidad del agua se centra principalmente en crear y fomentar hábitos de hidratación saludable ligada al consumo de agua potable, y los beneficios de su consumo”.
-¿Cómo se dio el proceso de elaboración del manual? 
-“La elaboración de este material educativo fue un proceso arduo y bastante complejo considerando que es un material original y a su vez único en su temática a nivel nacional. Antes de comenzar el diseño del material debimos informarnos bastante en términos de metodología y sistematización de la estructura del manual, para dar una estructura lógica y que esta guardara relación y coherencia en el desarrollo de todas las sesiones. Para conocer cuáles eran las unidades temáticas que se debían incluir en el material, el grupo de investigación EPIAN realizó diferentes grupos focales con escolares, padres y/o apoderados de las distintas comunas, con el objetivo de conocer las barreras y/o motivaciones que gatillan el consumo de agua y/o bebidas azucaradas”.
-¿Qué aspectos destacados recibieron como retroalimentación durante el Seminario Taller?
-“El compartir el material educativo con expertos del área, como lo son el equipo de nutricionistas, es bastante enriquecedor en términos de las acotaciones de carácter técnico que pudieron hacer. Por otro lado, el que los profesores y directivos de los establecimientos educacionales, felicitaran la labor que ha realizado el grupo de investigación EPIAN es gratificante, ya que comentan que un tema como es el fomento del consumo de agua y el tratar de desincentivar el consumo de las bebidas azucaradas, se vuelve complejo si no se tiene el asesoramiento indicado de los profesionales que corresponden. Además, destacaron que son iniciativas dignas de replicar en términos del impacto que generan en los escolares y su salud”.
La importancia de un material validado
La académica del Departamento de Nutrición y Salud Pública, Luz Lobos Fernández, comentó que esperan que con la implementación del Manual, los equipos técnicos de nutricionistas y profesores de enseñanza básica tengan un material de calidad con el cual poder trabajar el fomento del consumo de agua, disminuyendo así el consumo de bebidas azucaradas, abordando de esta manera una de las problemáticas actuales de la salud pública chilena, como son el sobrepeso y la obesidad en la población escolar.
“El proceso de validación de un material educativo consta de diferentes partes, y una de ellas es la que realizamos desde la mitad del año 2014 y el primer semestre de 2015, con la implementación del material educativo en los establecimientos educacionales. Nosotros desarrollamos ese material en base al trabajo que habíamos hecho previamente con grupos focales, con niños y con apoderados de las escuelas para recoger cuáles eran las motivaciones, las limitaciones y barreras que tenían frente a desincentivar el consumo de bebidas azucaradas, y las motivaciones y barreras que pudieran tener al momento de consumir agua. Esa información nos permitió desarrollar este material”, aseveró la investigadora.
La académica Luz Lobos destacó que la validación del Manual es importante puesto que se busca que dicho material sea reconocido y validado por profesionales de las áreas de educación y salud.
“El proceso de validación del material de educación contribuye a su pertinencia, que sea amigable para el trabajo en docencia, que es algo valorado por los profesores. Precisamente, los profesores destacaron que se trata de un material fácil de entender y posible de trabajar en las escuelas. El profesor necesita capacitarse en temas de nutrición y ahí es fundamental el rol del profesional nutricionista”, aseveró.
“Contamos con alrededor de 50 personas, nutricionistas, profesoras de enseñanza básica, trabajadoras sociales, y cada una aportó desde su mirada. Se logró un muy buen nexo entre las nutricionistas, los profesores y la academia. Ellos agradecieron la invitación y consideraron muy valioso el desarrollo de un material con estas características y cualidades. Ellas estiman que dicho material puede ser usado perfectamente en las escuelas, y puede ser presentado al Ministerio de Salud y de Educación para ser trabajado de manera transversal como material educativo. No sólo enseña sobre cómo hidratarse sanamente, sino que además contempla aspectos como el desarrollo del lenguaje, habilidades de comunicación, cuidado del medio ambiente, que son temáticas que pueden incluirse en el trabajo docente”, reseñó la investigadora UBB.
