Muy emocionados de poder reencontrarse y recorrer el campus Concepción se manifestaron los 13 estudiantes y egresados de la Universidad Técnica del Estado (UTE), antecesora a nuestra institución, durante su visita el 29 y 30 de abril.
La actividad consideró la recepción en el auditorio de Ingeniería en Maderas donde compartieron con el director de Departamento, Mario Ramos y el director de la Escuela de Ingeniería Civil en Industrias de la Madera, Gerson Rojas, a quienes dieron a conocer su experiencia en la UTE y los cambios que observan en la formación actual y en la industria, producto del desarrollo en las diversas disciplinas.
Durante sus intervenciones manifestaron lo importante que fue poder acceder a estudiar en la universidad, debido a que todos provenían de familias de escasos recursos y el gobierno de Salvador Allende posibilitó su ingreso a la Universidad Técnica del Estado. Por esos años -recordaron- solo se ofrecían cuatro carreras y la comunidad universitaria era muy unida. Inolvidable fue la construcción de edificios que los estudiantes se tomaron para vivir en pleno proceso de edificación. Luego, el Estado los cedería para formalizar los hogares estudiantiles que llegaron a constituirse en un apoyo clave para los jóvenes.
Así lo expresó Luis Pinilla Vásquez, egresado de Ingeniería de Ejecución en Maderas, quien sostuvo que la visita a la UBB “fue un sueño realizado, porque hay compañeros que no nos veíamos hace más de 50 años. Nosotros vivimos en una época muy intensa y eso creó una unión muy fuerte, convirtiéndonos en una familia. Después me fui a Brasil y me entregué por entero para salir adelante, gracias a los valores que me inculcaron mis padres, lo que aprendí en la universidad y a la disciplina y honestidad que siempre tuve”.
Juan Páez Gómez realizó sus estudios en Ingeniería en Maderas en la UTE, pero luego se trasladó a la Universidad de Santiago de Chile donde se tituló como ingeniero metalúrgico. Al regresar al campus Concepción señaló sentir mucha satisfacción, “porque hace 50 años estudié acá y lo que hoy veo no existía, posiblemente alguien soñó en convertir esta universidad primaria en algo tan complejo como lo que es actualmente”.
De su paso por la UTE recordó que junto a sus compañeros “éramos un grupo de personas que estudiábamos a puro corazón, sin tener donde vivir y por eso para nosotros eran muy importantes los hogares. Entonces, después de tantos años ver que casi el cien por ciento de esa generación educó a sus hijos y son buenas personas, es lo mejor. A mí me gustaría que siempre las universidades se preocupen que sus estudiantes sean buenas personas y después que sean buenos profesionales, porque eso es lo que hace falta en la industria”.
En representación de la UBB, Francisco Pérez Quinteros, profesional del Pabellón de Tecnología de la Madera de la Universidad del Bío-Bío y quien fuera estudiante de Ingeniería de Ejecución en Maderas, explicó que este era un sueño pendiente, pues siempre se han mantenido comunicados, pero no habían logrado reunirse. “Este grupo fue creciendo en amistad y compañerismo, también vivimos juntos momentos muy fuertes como fue el Golpe es Estado, pero logramos realizar el deseo de nuestros padres. Ahora ya pasado los años, muchos están jubilados algunos y viven en Santiago, Curicó, Talca, Los Ángeles, República Dominicana, Brasil, etc. Ya no esperaremos 50 años para el otro encuentro, tenemos fecha de juntarnos nuevamente, el 25 de octubre. Doy gracias a la Universidad por abrirnos las puertas y poder recordar hermosos momentos”.
