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Publicado el 28 de abril del 2021

Académicos/as valoran curso de docencia y evaluación a distancia dictado por el Tecnológico de Monterrey

Por Mariana Gutiérrez Vera
Etiquetas: Rectoría
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Positivos resultados arrojó el curso Aprender a enseñar y a evaluar a distancia, que dictó el Instituto Tecnológico de Monterrey, México, en el marco del plan de capacitaciones de la Unidad de Gestión Curricular y Monitoreo y el Área de Desarrollo Pedagógico y Tecnológico. Académicas y académicos que participaron en el programa valoraron los contenidos, metodología y recursos tecnológicos que se abordaron, varios de los cuales ya están utilizando en sus clases.

Aunque volvamos a la docencia presencial, hay nuevas herramientas que continuarán aplicándose en el aula. Desde hace tiempo que estaba claro que los estudiantes y el contexto sociolaboral han cambiado y no podíamos seguir haciendo docencia con metodologías disonantes con la actualidad. Lo que ha hecho la pandemia es obligarnos a adaptarnos de forma acelerada, reflexionó el director de la Escuela de Ingeniería Civil Álvaro Suazo, al intervenir en la ceremonia de clausura del curso.

Al acto, que tuvo lugar el viernes 16 de abril, concurrieron directivos de la UBB y del Tecnológico de Monterrey, profesores y participantes del programa. En la oportunidad, el rector Dr. Mauricio Cataldo señaló que la iniciativa revela el permanente compromiso institucional con la calidad de la educación y agradeció a los decanos que contribuyeron a la difusión del curso, en el que participaron 97 académicos, académicas y profesionales de nuestra casa de estudios. Asimismo, manifestó el interés de continuar trabajando con el Instituto Tecnológico de Monterrey y adelantó que en agosto se realizará un programa similar, para potenciar las capacidades de profesores y profesoras de la Universidad del Bío-Bío.

El curso Aprender a enseñar y a evaluar a distancia consta de tres módulos con sesiones sincrónicas y asincrónicas, enfocadas en fortalecer competencias disciplinares y transversales. El primer módulo se centra en el diseño de sesiones en línea, el segundo aborda el diseño de la evaluación del aprendizaje y el tercero trata de la inteligencia emocional para el aprendizaje. El programa contempla el desarrollo de tareas por módulo, para lo cual dispone del apoyo de especialistas asesores y acompañamiento personalizado de tutores.

El curso se extendió por un total de 41 horas, del 1 de marzo al 9 de abril, y según informó el coordinador académico del programa Dr. Leonardo Glasserman, fue aprobado por 93 por ciento de los/as participantes. El modelo educativo, los contenidos, el desempeño de los tutores y los medios tecnológicos del curso fueron evaluados como buenos o excelentes por más del 90 por ciento de 74 participantes que respondieron una encuesta aplicada para conocer su impresión al respecto.

En la ceremonia de clausura se dirigieron también a los/as asistentes el Dr. Eliud Quintero y las Dras. Katherina Gallardo y Nayeli Rodríguez, quienes tuvieron a su cargo los distintos módulos y destacaron el desempeño de los/as participantes. El acto concluyó con las palabras de la Dra. Inés Sáinz Negrete, vicepresidenta de Inclusión, Impacto Social y Sostenibilidad del Tecnológico de Monterrey.

Opiniones de académicos y académicas

Supe del curso por la convocatoria difundida a través del correo institucional y que reiteró el decano. Hice una pasantía en el Instituto Tecnológico de Monterrey y conozco su prestigio, los recursos que tiene y su preocupación por la docencia y las metodologías de enseñanza. El curso fue muy bueno, aunque me hubiera gustado poder profundizar más en algunos temas. Los contenidos abordados me han servido para mejorar mi trabajo, especialmente con respecto a la planificación de las clases, el orden y priorización de las materias y las evaluaciones. También lo relacionado con lo emocional, un aspecto que generalmente no se trata, pero que es muy importante para comprender lo que estamos viviendo. El apoyo de los tutores es igualmente algo positivo. Manejan muy bien los temas y están siempre atentos a responder dudas. (Fabricio Salgado, director de la Escuela de Ingeniería Civil Eléctrica).

Participo habitualmente en las capacitaciones del Área de Desarrollo Pedagógico y Tecnológico y cuando invitaron a este curso sobre docencia y evaluación a distancia me interesé de inmediato, porque es el tema y por la trayectoria del Instituto Tecnológico de Monterrey. Me sirvió mucho, especialmente en lo que se refiere al uso de tecnologías para hacer clases más interactivas y gatillar la motivación de los alumnos. Asimismo, los textos recomendados para abordar el componente socioemocional los estoy usando en una asignatura. El sistema de tutores funciona también muy bien. Están permanentemente dispuestos a ayudar y facilitan el desarrollo de las tareas. Incluso después de que el curso terminó, solicité un material y me lo hicieron llegar sin problemas. Además, los/as profesores son muy amenos y amables y la plataforma es de fácil acceso. (Marcela Concha, del Departamento de Ciencias Sociales).

El curso fue muy adecuado para los tiempos que vivimos, tal como lo indica su nombre: Aprender a enseñar y evaluar a distancia. Como académico no estaba preparado para realizar el trabajo tele comunicado. La enseñanza cambia drásticamente desde el punto didáctico, en especial, en lo que respecta a motivar y seleccionar la materia adecuada para cumplir con los objetivos. Otro aspecto que es difícil es la evaluación, que ya es un tema complicado en situación normal y que se torna aún más complejo con la modalidad a distancia. El curso abordó de manera dinámica, didáctica y entretenida la forma de abordar estas dificultades que se presentan a los académicos que no estábamos preparados para este tipo de enseñanza. (José Miguel Bastías, del Departamento de Ingeniería en Alimentos)

Regresé de Barcelona en marzo después de cursar un doctorado y debía adaptarme a la docencia on line. El año pasado, no pude participar de las inducciones que se realizaron por lo que me matriculé en el curso para conocer técnicas de enseñanza para esta modalidad. Fue una buena experiencia, profesores y tutores son muy agradables y preocupados. Me sirvió para aprender a utilizar aplicaciones en el ámbito de la enseñanza y también para conocer más de los aspectos socioemocionales. Estamos viviendo una situación muy sensible, hay un sentimiento general de cansancio y agobio. Tengo estudiantes de primer año, casi adolescentes, y les cuesta más manejar estas emociones, por lo que es muy importante saber de estos temas. Espero que haya más cursos como éste. (Carola Figueroa, del Departamento de Ciencias de la Computación y Tecnologías de la Informática).

En 2020 había tomado otro curso sobre docencia a distancia y creí que debía seguir avanzando. En este curso se abordó el tema de las emociones, lo que fue un gran aporte. El programa es bastante completo y bien articulado. Repasamos conceptos pedagógicos y paradigmas educativos, reforzando el valor de la acción de los profesores que, en momentos como los que vivimos, es aún más desafiante. Preparar las clases toma más tiempo y la interacción con los estudiantes es más compleja. Nos enfrentamos a una pantalla y es más difícil involucrarse con los sentimientos de alumnos y alumnas. Ahora estoy tomando un curso sobre inclusión, porque me parece que los temas socioemocionales son muy importantes. Lo mismo que la motivación y hacer clases más amenas utilizando la gamificación de contenidos, tema que también vimos en el curso. (Patricio Chandía, director de la Escuela de Pedagogía en Ciencias Naturales).

El curso es muy novedoso y aborda aplicaciones que no conocía y que podría utilizar en mis clases. Destaco el gran profesionalismo, preocupación y carisma de profesores y tutores, que armaron grupos de whatsapp para mantenernos comunicados. Rescato también el gran interés que concitó el curso, lo que refleja el compromiso de académicas y académicos de hacer las cosas bien. Aprendí que, en la modalidad a distancia, no debemos atiborrar a nuestros estudiantes, sino enfocarnos en lo esencial y que eso lo aprendan muy bien. Advertí también la importancia del trabajo en equipo, de tal forma que, por ejemplo, los ayudantes apoyen en los aspectos tecnológicos al docente y que éste se centre en los contenidos. (Patricia Arancibia, del Departamento de Ciencias Básicas).

Mariana Gutiérrez Vera

Mariana Gutiérrez Vera, Periodista. mgutierr@ubiobio.cl

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